La Secretaría de Hacienda estuvo a punto de dejar al Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) sin recursos para realizar la Encuesta Nacional de Ingresos y Gasto de los Hogares 2018, base para la medición de la pobreza, pero se logró rescatar 200 millones de pesos en el Congreso, sostuvo Gonzalo Hernández Licona, secretario ejecutivo.

En entrevista señaló que hace falta que el Congreso de la Unión asuma con más claridad las evaluaciones para tomar decisiones de política pública. Aseguró que aún hay duplicidad de programas, pues hay varios que se parecen unos a otros, ya sea dentro de secretarías o entre ellas.

En el seminario Buenas prácticas de monitoreo y evaluación en las entidades federativas 2017, se refirió a que cada vez hay más apoyo presupuestal a programas prioritarios, aquellos que con base en las evaluaciones que se tienen y a los nexos con la pobreza decimos que sí pegan directamente al ingreso y ha sido bien evaluado, por lo que debe ser prioritario para fines presupuestales.

Detalló que actualmente hay más recursos para programas prioritarios que hace tres años. Esto quiere decir que el presupuesto de desarrollo social ha tomado en cuenta las recomendaciones y evaluaciones del Coneval. En general se ha tomado en cuenta en ese proceso.

Citó como ejemplo que hay muchos programas de adultos mayores en las entidades y a escala federal. Se antoja que puede tenerse mayor coordinación y menor duplicidad. Hay mucho que hacer en materia de gasto y de manera paulatina se han tomado en cuenta las evaluaciones, señaló.

En el seminario se dio reconocimiento a las prácticas en materia de transparencia de la Ciudad de México, Campeche, Coahuila, Durango y Jalisco, entre otros. Hernández Licona sostuvo que a las entidades se destinarán alrededor de 3.8 billones de pesos, y parte de esos recursos corresponden al ramo 33, los cuales no siempre se han ejercido de manera transparente, por lo que planteó mayor coordinación con el Coneval para que ello se dé.