Mérida, Yuc.

Sin discusión alguna y a mano alzada, los 416 consejeros del PRI estatal aprobaron por unanimidad, este sábado, los métodos de selección de candidatos a gobernador, diputados locales y 106 alcaldes, con miras a las elecciones estatales de 2018.

Los 416 consejeros votaron que el abanderado a la gubernatura sea electo en asamblea de delegados; la mitad de candidatos a legisladores locales y ediles por foro de delegados, y la otra mitad por una comisión política integrada por el gobernador Rolando Zapata Bello, diputados locales y federales, así como otros representantes del PRI.

En la pasarela política figuraron los candidatos que más suenan para la gubernatura: Pablo Gamboa Miner, hijo del senador Emilio Gamboa; Jorge Carlos Ramírez Marín, presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados; Liborio Vidal Aguilar, diputado federal; y Mauricio Sahuí Rivero, secretario de Desarrollo Social estatal.

En tanto, el legislador federal, Francisco Torres Rivas, es el potencial abanderado para la alcaldía de Mérida, gobernada por el PAN.

En la selección para diputados y presidentes municipales, el tricolor tiene que garantizar la paridad en equidad de género, como lo establece el ordenamiento electoral vigente. En total, el PRI designará 132 candidatos a cargos de elección popular para los comicios de 2018.

Tampoco hubo sorpresas en el discurso. En la asamblea estatal extraordinaria, el dirigente estatal de ese instituto político, Carlos Sobrino Argáez, manifestó que el proceso de selección de los candidatos no se trata de una disputa interna porque un priísta no puede ser rival de otro priísta.

Sobrino Argáez elogió al gobernador Zapata Bello, presente en el acto, a quien calificó del mejor gobernador de México y de Latinoamérica. Manifestó que el tricolor actual es de diálogo e inclusión, porque con diálogo, territorio y estructura, el PRI va a obtener las victorias que sí importan y Yucatán necesita. Las vamos a obtener caminando hombro con hombro y cerrando filas, aquí y ahora.

Al interior del PRI no habrá enfrentamientos toda vez que en su militancia no (hay) ni infantiles, ni mezquinos, por lo que en el proceso interno no habrá un vencedor y mucho menos alguien será el vencido, sostuvo.