Con el aval de PRI, PAN, PRD y PVEM, el Senado emitirá la próxima semana la convocatoria para elegir al nuevo titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de los Delitos Electorales (Fepade), que habrá de concluir el periodo para el que fue electo el destituido Santiago Nieto Castillo, es decir, noviembre de 2018.

Luis Humberto Fernández, senador de PT Morena y secretario de la Comisión de Justicia, señaló que exigirán que haya un procedimiento abierto y con la participación de la sociedad civil, para evitar que de nueva cuenta se imponga un fiscal amigo, incondicional del presidente Peña Nieto.

Precisó que la convocatoria la puede expedir la Junta de Coordinación Política, pero debe tomar en cuenta que se trata de un asunto grave, en un país incendiado por la corrupción y la impunidad, en que se destituyó de forma ilegal a Santiago Nieto, con el propósito, dijo, de impedir que continuara con la investigación de recursos de Odebrecht en la campaña electoral del PRI en 2012.

Fernández resaltó que su bancada insistirá, a fin de que la elección del titular de Fepade se lleve a cabo a través del parlamento abierto, en un proceso en el que puedan participar universidades y organizaciones sociales, no por conducto de un proceso cerrado.

Advirtió que ese nombramiento, que debe desahogarse a la brevedad, puede quedar atorado, como es el caso del fiscal y los magistrados anticorrupción, por la obsesión del presidente Peña Nieto de colocar a sus cercanos e incondicionales en esos cargos.

Se requiere, insistió, elegir a un fiscal que cuente con objetividad, con independencia, con el valor de hacer frente a todos estos intereses tan grandes. Por eso debe ser un proceso abierto, en el que participe la sociedad en su conjunto y no sea una cuestión que se defina en la Junta de Coordinación Política, con una mayoría muy artificial del PRI y del Verde.

El riesgo de un titular de Fepade a modo, indicó, es tachar los delitos del pasado, no sólo Odebrecht, y dejar pasar los delitos electorales, como son el uso de programas sociales con fines electorales, el manejo indiscriminado de recursos públicos y dudosos, el espionaje y otros ilícitos que se cometen desde este momento en algunos estados.

La elección presidencial de 2018 está en juego y desde el poder no van a reparar en costos para poner a un fiscal amigo, por eso es tan importante el seguimiento de la sociedad.