En los penales estatales se comete la mayor cantidad de violaciones a las garantías individuales, pues en la mayoría de ellos, como el de Neza-Bordo, los internos controlan diversas áreas, señaló el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez.

Interrogado sobre el motín que ayer ocurrió en el penal Sergio García Ramírez, en Ecatepec, estado de México, sostuvo que los internos controlan muchos de estos centros y cometen con toda impunidad torturas y otros actos deplorables contra otros presos.

En la inauguración de la exposición temporal de carteles Migración y derechos humanos, en las rejas del Bosque de Chapultepec, el funcionario señaló que la CNDH ha recomendado cambiar las condiciones de diversos reclusorios, entre ellos los de Cadereyta y Topo Chico, en Nuevo León, y los del estado de México.

Dijo que mejorar los penales no es sólo un problema de presupuesto, sino de verdadera voluntad política , y que las condiciones en que viven los reclusos son lamentables.

Agregó que también se han hecho recomendaciones a la Comisión Nacional de Seguridad para mejorar la situación de los reclusorios, y ha habido disposición de las autoridades federales para que el ombudsman nacional observe directamente el manejo y la operación de esas instalaciones.

González Pérez indicó que también se requiere cambiar la política criminológica, y advirtió que no puede haber un sistema penal exitoso si se descuida la última parte del proceso, los centros penitenciarios, porque no cumplen con la reinserción social de quienes saldrán algún día.