Juchitán, Oax.

Desde el terremoto del 7 de septiembre, la escuela secundaria Rufino Tamayo es la única institución gratuita de nivel básico que ha iniciado labores de forma gradual en Juchitán, a pesar de que Protección Civil no ha dado a conocer el dictamen de su peritaje.

La decisión de volver a las aulas fue avalada por 95 por ciento de los padres de familia, quienes han constatado que la mayoría de los salones no presentan daños aparentes.

El personal del plantel, que tiene la clave 20DES167 y se ubica en la novena sección, una de las más pobres de la ciudad, informó que hace tres semanas peritos enviados por Protección Civil estatal hicieron una inspección.

Hasta ayer se ha presentado más de 95 por ciento de los alumnos. Los estudiantes de tercero acudirán a clases lunes y martes; los de segundo grado, miércoles y jueves, y los de primer, viernes y sábado, todos de 9 a 13:30 horas. Son más de 400 estudiantes divididos en 16 grupos; en promedio, han acudido 100 por día.

Los profesores elaboraron el calendario para recuperar los 30 días que perdieron por el terremoto y los padres de familia lo aceptaron.

La institución cuenta con 35 trabajadores que desde hace años aplican el llamado Plan para la Transformación Educativa de Oaxaca, diseñado por la sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, que asegura que este esquema ha reforzado los saberes comunitarios de los estudiantes y es alternativo a la reforma educativa.

Simulacros y prevención

Las clases se reanudaron 40 días después del terremoto, al igual que la aplicación de un programa de protección civil en caso de sismo y de prevención de accidentes, que se imparte en la primera hora del turno. En la última hora se realiza un simulacro que cada vez toma menos tiempo. La meta es hacer la evacuación en un máximo de segundos.

Al escuchar una sirena que simula la alarma sísmica, los alumnos salen de las aulas rápida pero ordenadamente y se concentran en puntos de encuentro que los profesores han pintado en el piso.

Primero creamos una comisión de prevención, protección y seguridad escolar, que dirige el profesor de educación física, Celestino Santiago Gurrión, y lo llevamos a la práctica con los estudiantes. La finalidad es que conozcan qué hacer en caso de un sismo y cómo prevenir accidentes, y que lo compartan con sus familiares, dijo Luis Fernando Canseco Girón, director del plantel.