La renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) continuará hasta el primer trimestre de 2018 y se alineará con la elección presidencial, por lo que sería saludable que los candidatos expliquen su postura sobre la agenda bilateral con Estados Unidos y su visión sobre las conversaciones con ese país y Canadá, afirmó anoche el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal.

En su comparecencia ante la Comisión de Economía de la Cámara de Diputados, el funcionario consideró que, en caso de darse por terminado el TLCAN, el gobierno de México mantendrá congelados los dulces que le interesan a Estados Unidos y apostará a la importancia estratégica del Acuerdo Estratégico Transpacífico de Asociación Económica (TPP, por su siglas en inglés).

Este instrumento –dijo– terminó convirtiéndose en una pista de aterrizaje alterna al TLCAN y consideró necesario fortalecerlo.

Agregó: ¿Para qué? Para, si en tres años un nuevo presidente de Estados Unidos cambia de opinión y considera que el TPP es estratégicamente relevante en su política de Asia y en el, esperemos, no probable escenario que se haya eliminado el TLCAN, será más fácil el argumento de la visión estratégica del TPP, que iniciar de cero el debate del TLCAN, tan contaminado en el debate en América del Norte.

Evaluó que cualquier posibilidad de un incremento a los salarios mínimos debe tomar en cuenta que uno de los efectos importantes de mejorar las condiciones de los sueldos más vulnerables es el efecto en el consumo y eso fortalece la economía.

Las preguntas sobre el estado de la renegociación del tratado no abundaron en la reunión de trabajo, e incluso de los 19 –de 30 integrantes– que asistieron, Carmen Victoria Campa (Panal) y Armando Soto Espino (PRD) de plano declinaron sus preguntas.

Y eso que, al inicio del encuentro, Guajardo planteó que, ante las posturas de Estados Unidos, el gobierno federal requerirá del respaldo de la Cámara.

Porque en la mesa siempre está la posibilidad de un escenario alternativo y en éste, la Cámara juega un papel trascendental para solidificar cualquier escenario que implique claramente la alternativa de que no continúe este acuerdo. Es algo que no buscamos, pero no es sanamente descartable, resaltó.

El diputado Vidal Llerenas (Morena) preguntó si el gobierno de México ha decidido dar por concluido el tratado o si es preferible posponerlo para que el próximo gobierno lo aborde.

Guajardo sostuvo que la responsabilidad del gobierno es no evadir su obligación, sino continuar en el proceso y aclaró que nunca hubo un compromiso para terminar la renegociación en diciembre de este año.

Y viendo que esto seguramente nos llevará al primer trimestre, si es parte de los debates de los candidatos, es saludable. El país merece saber lo que piensan quienes aspiran a dirigir este país, indicó.

Mientras diputadas como Alma Lucía Alonso quisieron saber sobre la equidad de género en la secretaría, Claudia Anaya Mota (PRI) preguntó sobre los tuits groseros de (Donald) Trump.

El funcionario le respondió que con los negociadores incluso hay camaradería. “Pero si su jefe les ordena poner en la mesa algo en lo que no creen, sólo ven con ojos de ‘tú sabes de dónde viene’, y eso genera una dinámica distinta.”