Pacientes y médicos del IMSS se reúnen para festejar
La donación de órganos avanza, pero todavía hay mucha ignorancia
Domingo 22 de octubre de 2017, p. 30
Los directivos del Hospital General Regional número 1 Carlos MacGregor, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), celebraron la realización del trasplante número 200 en sus instalaciones, y destacaron que este logro fue posible gracias a la capacidad de su equipo de médicos, pero también a la gestión adecuada de los recursos del organismo.
Tras develar una placa conmemorativa –rodeados de sus colegas y pacientes–, los médicos subrayaron la importancia de que este tipo de intervenciones quirúrgicas se puedan realizar también en un centro de salud de segundo nivel, y no sólo en los grandes hospitales de especialidades.
La nefróloga Laura Basagoitia González recordó en entrevista que el primero de esta serie de 200 trasplantes se realizó el 13 de julio de 2004, y desde entonces un pequeño grupo de médicos ha sostenido dicha labor, sobre todo para pacientes que necesitan córneas, riñones o médula ósea.
Es muy satisfactorio verlos bien, saber que los receptores de una donación mejoran su calidad de vida, ver que se casan, terminan sus carreras y ya tienen hijos. Terminamos encariñándonos mucho e incluso haciendo amistad con ellos porque los vemos constantemente
para vigilar su estado de salud, destacó la especialista.
Antes se creía que (los trasplantes) sólo se podían hacer en los grandes hospitales, pero hoy sabemos que también los podemos hacer en los de segundo nivel. Ya no se requieren tantas manos, tantos días de estancia hospitalaria, e incluso disminuimos costos para los pacientes
, añadió.
Para Basagoitia, la cultura de la donación de órganos y tejidos ha avanzado mucho en el país, pero todavía nos topamos con mucha ignorancia y muchos mitos. La semana pasada vimos a un paciente que tiene nueve hermanos y ninguno quiere donar porque tienen miedo
de lo que pueda suceder, y desconocen que se puede vivir con un solo riñón sin ningún problema.
Esta falta de información, lamentó la nefróloga, sigue provocando que las enfermedades renales continúen siendo una de los principales causas de comorbilidad en el país, porque no se diagnostica a tiempo, y cuando se hace, los daños ya están muy avanzados y muchas veces sólo nos quedan las diálisis, las hemodiálisis y los trasplantes
.
Jorge Arturo Trujillo Hernández, titular de la Delegación Sur del IMSS, también saludó que los trasplantes puedan realizarse en hospitales de segundo nivel, cuando antes eran una labor exclusiva de los centros de salud más grandes y con más recursos, y subrayó que esta tarea pudo ampliarse gracias a la estabilidad financiera del instituto.
Entre las decenas de personas que acudieron a celebrar los 200 trasplantes del hospital Carlos MacGregor se encuentran los hermanos Alejandro y Gabriel Cruz Valverde, quienes afrontaron juntos el desafío de resolver la enfermedad renal que aquejaba al primero.
Mis riñones se hicieron pequeños, como piedras, de un momento a otro me sentí mal y ahí empezó el calvario. Fue difícil porque empecé con cansancio, tenía los pies hinchados, empezaba a devolver todo lo que comía y no soportaba el olor de la comida
, cuenta Alejandro.
Luego de esperar en vano por un trasplante de paciente cadavérico, y de explorar sin éxito la posibilidad de que otros familiares fueran donantes, Gabriel tomó la decisión de darle a su hermano uno de sus riñones.
Es difícil, porque es algo nuevo y a veces uno no sabe cómo es el proceso. Por la ignorancia, pensamos que vamos a quedar mal, pero no fue así
, cuenta el joven, orgulloso de haberle dado a su hermano la oportunidad de tener mejor calidad de vida.