Mazatlán, Sin.

Con gritos de ‘‘queremos justicia’’ y ‘‘ni una más’’, cientos de personas marcharon por el fraccionamiento Pradera Dorada (sección tres) para protestar por el crimen cometido contra Melanie, adolescente de 17 años que fue asesinada el pasado lunes dentro de su vivienda.

Reclamaron a las autoridades que el fraccionamiento se haya convertido en un refugio de criminales, los cuales caminan por las avenidas de este sector de la ciudad de manera impune, debido a que los elementos policiacos no actúan para detenerlos.

El director de seguridad pública de Mazatlán, Joel Ernesto Soto, fue increpado por más de 300 vecinos, quienes reclamaron la ausencia de vigilancia y denunciaron que personas armadas circulan como si nada, además de que se cometen atracos en las casas de manera frecuente.

El funcionario los invitó a levantar la denuncia, pero los manifestantes reprocharon que los policías saben muy bien quiénes son los delincuentes, los que después de ser detenidos terminan siendo liberados, por lo que temen por su integridad.

Joel Ernesto Soto se comprometió a intensificar los rondines policiacos y garantizar que las luminarias de este fraccionamiento de interés social tengan el mantenimiento adecuado.

El alcalde Fernando Pucheta lamentó que Melanie, quien cursaba el tercer grado de bachillerato, fuera asesinada en su domicilio por un sujeto que entró presuntamente a robar y luego la mató a golpes y con un arma blanca.

‘‘No me vendo los ojos para no reconocer que existen casos de vandalismos que son denunciados por las personas cuando recorren las colonias y que son atendidos con más rondines de los agentes policiacos’’, dijo.

Argumentó que desde el inicio de su administración se han reforzado los operativos en la ciudad y la zona rural, además de que se ofrece capacitación a los elementos preventivos para enfrentar con mayor efectividad la delincuencia.