Más de 14 mil alumnos en los municipios mexiquenses de Ocuilan y Tenancingo sigue sin estudiar desde el sismo del pasado 19 de septiembre, debido a que unos 200 planteles quedaron destruidos y las autoridades no han autorizado el regreso a clases.

Padres se manifestaron ayer en la alcaldía de Ocuilan para demandar la apertura de dos escuelas. Según ellos, no presentan daños graves, pero no se han emitido los dictámenes de riesgo.

Exigieron al alcalde Félix Alberto Linares González acelerar la reapertura de las escuelas que sólo presentan daños en bardas perimetrales y dijeron estar preocupados por aquellas que colapsaron, pues no les han dicho qué pasará con los alumnos.

Nos piden que tengamos paciencia, pero ya pasó un mes y no dicen si van a construir aulas provisionales o los van a reubicar, dijo Ramiro, padre de dos alumnos de la escuela Juan Escutia, de la comunidad de Santa Martha, en ese municipio del sur del estado.

En Santa Lucía, Ocuilan, los padres se organizaron con integrantes de una asociación civil y construyeron 18 aulas de madera para que los niños retornen a clases, pero la Secretaría de Educación estatal no les ha dado permiso.

Linares González explicó: De 102 planteles que hay en el municipio sólo 10 han retornado a clases. Son más de 6 mil niños sin escuela desde hace un mes.

El alcalde de Tenancingo, Roberto Espiridión Sánchez Pompa, refirió que hay más de 8 mil alumnos sin clases en esa localidad y el ayuntamiento está buscando terrenos para aulas provisionales, mientras se reconstruyen o rehabilitan las escuelas afectadas.

En Ecatepec, unos 250 padres de familia y profesores de cinco escuelas de la parte alta de la Sierra de Guadalupe se manifestaron ayer frente al palacio municipal para exigir la reconstrucción de varios colegios, pues debido al sismo más de mil 500 alumnos no han tenido clases.