Ningún grupo ha reivindicado el atentado, pero autoridades lo atribuyen a Al Shabab
Declara el gobierno tres días de luto
La mayoría de cadáveres, irreconocibles por quemaduras
Lunes 16 de octubre de 2017, p. 29
Mogadiscio.
La explosión de un camión en la capital de Somalia mató a por lo menos 276 personas y dejó más de 300 heridos, de acuerdo con el ministro del Información, Abdirahman Osman, en el atentado más mortífero en esta nación del Cuerno de África.
El balance de muertos por el ataque bárbaro que perpetró el sábado el grupo terrorista Al Shabab se ubica en 276
, publicó el ministro en Twitter.
Como en ocasiones anteriores, se sospecha que detrás del doble ataque están las milicias yihadistas de Al Shabab que luchan contra el gobierno central somalí y reivindicaron en el pasado numerosos atentados en el este de África, pero al cierre de esta edición ese grupo vinculado a Al Qaeda no había reinvindicado los ataques.
Un camión bomba estalló el sábado afuera de un hotel en concurrida avenida de Mogadiscio, con saldo inicial de 20 muertos. Más tarde, un camión lleno de explosivos explotó en otra calle repleta de gente, cerca de los principales ministerios, incluido el de Asuntos Exteriores, en el barrio de Madina. Muchos de los cuerpos en las morgues aún no han sido identificados.
Antes de hacer volar el camión en uno de los cruces más transitados de Mogadiscio, el atacante condujo a alta velocidad por una calle de la capital arrollando motocicletas y automóviles y empujando vehículos que estaban varados en un embotellamiento, contaron testigos.
Las fuerzas de seguridad intentaron disparar contra el conductor, quien, sin embargo, logró llegar al cruce donde se inmoló. En ese lugar las fuerzas de seguridad realizan normalmente controles vehiculares.
A principios de este año Al Shabab, que pretende imponer un Estado religioso según el régimen de la Sharia o ley islámica, prometió continuar con los ataques luego de que el gobierno del presidente Donald Trump y el mandatario de Somalia anunciaron nuevos operativos militares contra el grupo.
Los médicos luchaban este domingo por tratar de salvar a cientos de víctimas gravemente heridas, muchas con quemaduras que los han dejado irreconocibles. Esto es realmente horrendo, nunca habíamos visto algo así
, indicó Mohamed Yusuf, director del hospital Medina.
Las sirenas de ambulancias se escuchaban por toda la ciudad un día después de la explosión y las familias desoladas deambulaban entre los escombros de edificios en busca de parientes desaparecidos. En los 10 años que llevamos como rescatistas en Mogadiscio no habíamos visto algo como esto
, tuiteó el servicio de ambulancias que depende de las donaciones privadas y el único servicio del sector gratuito en la ciudad.
Recibimos diferentes cifras de los centros médicos, la mayoría de los fallecidos estaban calcinados a tal punto que son irreconocibles. El balance de muertos puede agravarse
, declaró a la agencia de noticias Afp Ibrahim Mohamed, un mando policial.
Es muy difícil tener una cifra precisa porque los cuerpos de los muertos fueron trasladados a diferentes centros médicos, y algunos fueron retirados directamente por sus allegados para ser enterrados
. Mohamed precisó que se trata del peor atentado
perpetrado en Somalia.
Cientos de personas llegaron al lugar en busca de familiares desaparecidos y la policía ordenó acordonar el área por razones de seguridad.
El presidente Mohamed Abdullahi Mohamed declaró tres días de luto y se unió a miles de personas que respondieron a una petición desesperada de los hospitales a la población para donar sangre. Estoy suplicando a todos los somalíes para que donen
, expresó el mandatario.
El horrible ataque demuestra que nuestro enemigo no detendrá nada para causar dolor y sufrimiento a nuestra gente. Unámonos contra el terror
, apremió el mandatario por medio de su cuenta de Twitter.
La ciudad de Mogadiscio está acostumbrada a las explosiones letales de Al Shabab, sin embargo, no había presenciado una como la del sábado. El estallido destrozó las esperanzas de recuperación en un país empobrecido y frágil tras décadas de conflicto. También suscitó dudas sobre la capacidad del gobierno para asegurar la ciudad, que cuenta con una población de más de 2 millones de habitantes.
A ellos no les importan las vidas del pueblo somalí, madres, padres e hijos
, afirmó el primer ministro Hassan Ali Khaire. Han atacado el área más poblada de Mogadiscio y sólo han matado a civiles
.
Rescatistas buscaban a sobrevivientes atrapados entre los escombros del hotel Safari, que fue destruido en su mayor parte y se encuentra cerca de la cancillería de Somalia. La fuerza de la explosión hizo desaparecer las puertas de metal y los muros presuntamente antiestallidos que habían sido erigidos afuera del inmueble.
Estados Unidos condenó la explosión y dijo que esos ataques cobardes fortalecen el compromiso para ayudar a nuestros socios en Somalia y la Unión Africana a combatir la amenaza del terrorismo
.
La explosión del sábado ocurrió dos días después de que el director del Mando Africano de Estados Unidos se reunió con el presidente de Somalia, y de la renuncia del ministro de Defensa por razones que no se han dado a conocer.
El representante especial del secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para Somalia, Michael Keating, condenó el atentado y dijo que la prioridad inmediata es apoyar los esfuerzos encabezados por las autoridades para ayudar a los afectados.
La comunidad internacional hará todo lo posible para apoyar al pueblo y al gobierno somalí a superar esta tragedia
, indicó Keating.
Agregó que la ONU y la Misión de la Unión Africana en Somalia trabajarán estrechamente para apoyar la respuesta del gobierno somalí y las autoridades locales de Mogadiscio, incluyendo la provisión de apoyo logístico, medicamentos y conocimientos técnicos.