Esta crisis es de identidad; los Calderón, afines al PRI
Domingo 15 de octubre de 2017, p. 11
A diferencia de otras crisis que ha tenido el Partido Acción Nacional (PAN), en la actual no hay un árbitro que busque la conciliación de los grupos en conflicto, dijo Juan Miguel Alcántara Soria, panista de larga trayectoria, mientras Ernesto Ruffo Appel, ex gobernador de Baja California, minimizó la fractura de este instituto político y consideró que sólo saldrá una élite, pero no la militancia.
Luis Felipe Bravo Mena, fiscal anticorrupción del blanquiazul, destacó que su partido siempre ha salido avante de sus problemas internos, aún del más grave, que fue en 1976, cuando no pudo postular candidato presidencial.
Alcántara Soria, ex secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, recordó que ya le ha tocado vivir varias crisis en el PAN y ver la salida de diversos personajes, como José González Morfín y Jesús González Schmall. Su dimisión, explicó, fue por discrepancias en la estrategia política, ya sea frente al gobierno o en la conducción del partido.
Sin embargo, la problemática actual es mucho más grave, porque mientras en las otras hubo un presidente de partido que buscó conciliar, ahora en la dirigencia nacional no hay disposición a arbitrar o crear espacios de diálogo.
La posibilidad de comunicación sólo se observa con el Frente Ciudadano por México y los de afuera. Ojalá hubiera esa firme disposición hacia adentro, señaló el ex procurador de Guanajuato, quien estimó que la crisis del blanquiazul es de identidad.
Simpatizante de la candidatura presidencial de Margarita Zavala, Alcántara Soria expuso que la renuncia de la ex diputada se explica por la ambigüedad en la que se mantiene el dirigente Ricardo Anaya, al ser al mismo tiempo presidente del partido y precandidato presidencial, sin asumir uno de los papeles que le toca, que es ser árbitro, mediador y cuidador de la vida orgánica del PAN.
Contra el análisis de politólogos que ven pocas posibilidades de triunfo a la candidatura presidencial independiente de Zavala, el jurista puntualizó que la falta de credibilidad de los partidos políticos va a incrementar las posibilidades de que tenga mejores resultados.
Ruffo Appel, por su lado, resaltó que en Acción Nacional lo que se está viviendo es el término del dominio de una familia: los Calderón, a quienes ubica como representantes de los intereses del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Acción Nacional.
Añadió que esta familia está asociada a una época de la política nacional caracterizada por las concertacesiones y el prianismo. Con su salida, el partido va de regreso a su naturaleza ciudadana, dijo.
El ex gobernador consideró que los calderonistas están en camino a la marginalidad, entre otras razones porque representan los intereses del PRI en el blanquiazul.
En alusión a los senadores que trabajaron en el gabinete del ex presidente Felipe Calderón, subrayó que es un eufemismo autonombrarse los rebeldes
, porque, en realidad, son traidores
.
No sé cómo le van a hacer para justificar ante sus hijos este comportamiento, que es una deshonra total. Pero allá ellos, se vendieron al diablo, que se llama PRI
, concluyó.