Hoy y mañana, el grupo irlandés U2 tocará en el Foro Sol de Ciudad de México para conmemorar 30 años de The Joshua Tree, uno de los álbumes considerados obras maestras en la historia del rock.

Han pasado seis lustros desde el lanzamiento de The Joshua Tree y aún hacen perder la cordura cuando desfilan por ellas notas de blues, gospel, soul y hasta country.

La primera triada de rolas compuesta por Where the streets have no name, I still haven’t found what I’m looking for y la simbólica With or without you, dan cuenta de ese prodigio de 11 tracks que convirtió a U2 en una banda importante.

También están Bullet the blue sky, Running to stand still, Red hill mining town, In god’s country, piezas, que, aunque no son representativas del disco, son muy emotivas. Trip through your wires, One tree hill, Exit y Mothers of the disappeared cierran el disco de manera formidable, con la melancólica voz de Bono; Adam Clayton, en uno de los mejores momentos en el delicado/incesante bajeo que una grabación haya registrado; Larry Mugen, en la batería omnipresente de ensueño, y la guitarra de The Edge, siempre la guitarra de The Edge, sacando sonidos inverosímiles a veces oníricos y a veces encabronadamente propios.

Con The Joshua Tree U2 consiguió un disco de Platino en sólo dos días, cuando dicho reconocimiento se otorgaba por un millón de unidades vendidas. Alcanzó varios sitios en las listas de popularidad de al menos una veintena de países; vendió 15 millones de copias y, por supuesto, ganó todos los premios que entonces entregaba el mercado común. Con ese disco se le dio el calificativo de la banda más grandiosa del mundo.

Otro factor que hace grande a The Joshua Tree es la mancuerna de Daniel Lanois y Brian Eno, dos de los productores más importantes del mainstream musical del rock. Hay quienes consideran que gran parte del éxito del disco radica en el trabajo realizado por dicho tándem, idea que se ha ido diluyendo con el tiempo.

The Joshua Tree es la síntesis de U2, un postulado de combatividad filosófica y pacifista, con el que aquel cuarteto de jóvenes católicos protestantes de Dublín, Irlanda, adquirieron su cenit creativo (claro, después vendría Achtung Baby, pero esa es otra historia).

La visita a Ciudad de México de U2 es todo un acontecimiento. Vuelven con la gira The Joshua Tree Tour 2017, para cuya celebración se lanzó una edición de aniversario del disco el pasado 2 de junio, a cargo de Interscope Records, con distribución de Universal Music. Incluye la grabación en vivo del concierto The Joshua Tree Tour 1987 en el Madison Square Garden, y otras rarezas y lados B.

Para el concierto de hoy los boletos ya están agotados. Para la segunda fecha hay algunas localidades disponibles en taquillas del Foro Sol y Ticketmaster.

Ocesa y la banda donarán refugios de emergencia para 2 mil familias damnificadas por los sismos recientes, vía la organización Cadena, se anunció en un comunicado.

En tanto, Bono, vocalista y líder de la banda, recorrió la mañana de ayer el Museo Soumaya en compañía del empresario mexicano Carlos Slim Helú. El músico también convivió con seguidores que se encontraban dentro del recinto y hasta se tomó fotos con ellos. Bono ya había visitado el museo, en mayo de 2011, cuando trajo la gira 360°.