El capital proviene del Fonden y de un bono catastrófico
del Banco Mundial
Miércoles 27 de septiembre de 2017, p. 16
Esta semana, el gobierno federal determinará la estrategia para el cálculo de daños y destino del gasto en materia de reconstrucción. Como piso, México contaría con unos 15 mil millones de pesos: 9 mil del Fondo Nacional de Desastres (Fonden) y aproximadamente 6 mil millones de pesos de un bono para catástrofes emitido por el Banco Mundial.
Hasta el momento se han emitido algunas cifras preliminares de edificios con daños severos, así como de un total de 44 inmuebles colapsados tan sólo en la capital del país, tras el sismo del 19 de septiembre.
No hay por el momento ninguna información –pública y oficial– del número de damnificados ni de los inmuebles con algún grado de afectación.
La única cifra dinámica e imparable desde el día del terremoto del 19 de septiembre es el saldo fatal. Al mediodía de ayer martes iban 333 fallecidos: 194 de Ciudad de México, 74 de Morelos, 45 de Puebla, 13 del estado de México, seis de Guerrero y uno de Oaxaca.
Además de las aportaciones de empresas y particulares, tanto del país como del extranjero, el país contaba hasta antes del 19 de septiembre con una bolsa aproximada de 9 mil millones de pesos para atender desastres provocados por fenómenos de la naturaleza.
Es decir, por un lado correría el fideicomiso formado con recursos privados o de organizaciones no gubernamentales y, por otro, los recursos del Fonden y el bono para atender situaciones catastróficas, aun cuando el objetivo sea uno solo: la reconstrucción y reparación de los daños.
Si bien este Fondo ya tiene reglas de operación definidas, se deberá elaborar un plan, en conjunto con los gobiernos locales, indicaron fuentes de Secretaría de Gobernación.
En principio se debe elaborar un censo en las zonas afectadas por el sismo del 19 de septiembre –tal como se hizo con Oaxaca y Chiapas, tras el movimiento telúrico del 7 de septiembre– y después hacer el cálculo respectivo, para fijar los montos de gasto para recuperación de infraestructura y de viviendas.
A escala central, dentro del presupuesto de Gobernación, este año se asignó un fondo de 222 millones para la operación de la estructura administrativa del sistema nacional de protección civil, así como 80.2 millones para el Centro Nacional de Prevención de Desastres.
No se deben confundir los 9 mil millones del Fonden con lo que ya se ha gastado para apoyar en la emergencia (atención a las necesidades de alimentación y abrigo de la población), los cuales corren a cargo de otra bolsa coordinada por Gobernación pero, sobre todo, en este caso, de donaciones de toda especie de la sociedad civil.