Torreón, Coah.

En un partido descafeinado, Santos y Toluca no lograron pasar de un empate 0-0 en el cierre de la jornada ocho del torneo Apertura 2017. Fue una gris igualada que para los Diablos tuvo sabor de victoria, ya que escalaron al cuarto lugar, con 13 puntos.

Los Guerreros dieron batalla en el campo, pero no logran levantar el vuelo y se quedaron en el lugar 14, con ocho unidades.

El encuentro fue cerrado y con pocas emociones; aunque ambos equipos intentaron pelear por llegar a la meta rival les fue complicado pasar del medio campo. Lo más emocionante fue al final, cuando el jugador del Santos Néstor Araujo fue expulsado por conato de bronca.

Los Guerreros fueron los primeros en acercarse a la meta con un cabezazo de Araujo que pasó por un costado del arco.

El duelo apenas empezaba y ya se desataba una polémica arbitral cuando el propio Araujo soltó un manotazo a Rodrigo Gómez, una agresión que no fue sancionada.

Los toluqueños también se lanzaron al embate con tiros de Santiago García y de Maximiliano Peg que no llegaron a la redes por mala dirección.

Consciente de la necesidad de puntos, Santos comenzó a presionar. Walter Sandoval atacó con un disparo de pierna derecha desde fuera del área que alcanzó a rozar el segundo palo.

Al regreso del vestidor, aumentó la intensidad en el duelo con más jugadas de ataque de los laguneros. Diego de Buen estuvo cerca de marcar el anhelado tanto con disparos que pasaron por arriba del travesaño.

En el área técnica, el estratega santista José Manuel Chepo de la Torres gritaba dando órdenes, daba vueltas y el nerviosismo lo dominaba.

Los escarlatas se mantuvieron en el esquema defensivo, cuando de pronto Rubens Sambueza se filtró al área y envió un pase a Rodrigo Salinas, pero éste falló en el remate.

En el último tramo, Santiago García puso tensión con un remate de cabeza que fue rechazado por el arquero de Santos, Jonathan Orozco.

Al término del duelo el silbante Fernando Guerrero mostró tarjeta roja a Néstor Araujo, quien se enfrascó en una discusión con Fernando Uribe.