Saint John’s.

El huracán Irma, de categoría 5, la máxima en la escala Saffir-Simpson, golpeó las islas de Barbados, San Martín y San Bartolomé, donde dejó al menos siete muertos y una estela de destrucción. Además, José, otro huracán categoría 1, se formó en el Atlántico, y Katia, en el Golfo de México, también de nivel 1, amenaza costas mexicanas.

Al pasar por Barbados, Irma, el huracán más fuerte que se ha formado en el Atlántico causó inundaciones y derribó árboles. Ahí murió Zander Venezia, de 16 años y considerado una promesa del surf, al intentar conquistar las inmensas olas causadas por Irma e impactar contra un arrecife.

En las islas francesas de San Martín y San Bartolomé se informó de seis muertos. La ministra Annick Girardin declaró a la cadena BFMTV que no se descarta que aumente la cifra de decesos.

La gendarmería de San Martín estimó que entre 60 y 70 por ciento de las viviendas quedaron destruidas.

Irma mantuvo su fortaleza con vientos máximos sostenidos hasta de 295 kilómetros por hora mientras atravesaba las Antillas menores en el Caribe y, según meteorólogos, se dirige rumbo a las Islas Vírgenes, Puerto Rico, República Dominicana, Haití, Cuba y el sur de Florida.

El Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos reportó que Irma tocó tierra en Barbuda con vientos de 255 kilómetros por hora, desde donde se mueve hacia Puerto Rico. Al cierre de esta edición, Irma pasaba por el norte de las islas Vírgenes, unos 150 kilómetros al este de Puerto Rico, donde ya hay mil personas en albergues.

Una alerta de huracán está vigente para Cuba desde la provincia de Matanzas hacia el este hasta la provincia de Guantánamo, señaló el CNH y recomendó a los residentes de Haití, República Dominicana, Bahamas y Florida vigilar el desplazamiento del fenómeno.

Mientras Irma está en pleno auge, las autoridades meteorológicas alertaron de otros dos fuertes huracanes en el Atlántico, José, ubicado lejos de tierra en el Caribe, y Katia, frente a las costas mexicanas en el Golfo de México, lo que confirma la opinión de los científicos de que el aumento de temperatura en los océanos provocará que lo huracanes sean cada vez más intensos.

De acuerdo con funcionarios locales, la tormenta Harvey dejó al menos 70 muertos en el sureste de Texas.