Las autoridades de la Secretaría de Salud (Ssa) pusieron en marcha una política de mercantilización y precarización del sector, cuyos efectos principales son la falta de creación de miles de fuentes de empleo y la subrogación de varios servicios en los hospitales.

Así lo denunció la Alianza de Trabajadores de la Salud y Empleados Públicos (Atsep) durante el mitin efectuado frente a la sede de la Ssa, donde los inconformes señalaron que aunque el gobierno federal se comprometió hace tres años a abrir al menos 32 mil plazas, dicho proyecto no se ha cumplido, lo cual generó retrasos considerables en los tiempos de atención a los pacientes.

El número de empleos que deberían crearse asciende a alrededor de 50 mil, si se toman en cuenta los sitios que han dejado vacantes en los pasados 10 años todos los trabajadores del sector que se han jubilado, renunciaron o fallecieron, subrayó Antonio Vital, integrante de la Atsep.

Por otro lado, los manifestantes acusaron que la Ssa recurre cada vez con más frecuencia a la subrogación de diversos servicios realizados por empresas privadas dentro de los hospitales públicos, como laboratorio, endoscopía, tomografía y otros análisis especializados.

Asimismo, denunciaron que las pocas contrataciones realizadas en años recientes se hicieron sin cumplir las condiciones laborales mínimas, ya que se trata de empleos precarizados, en los cuales con el salario de un trabajador de base le pagan ahora a dos o hasta a tres, que no tienen prestaciones.

Los manifestantes también exigieron que el sector haga un rescate y refinanciamiento de sus jubilaciones y pensiones –con el fin de evitar que pierdan dinero al ser invertidas en el mercado bursátil– y que el gobierno produzca sus medicinas, en vez de comprarlas a grandes laboratorios farmacéuticos.