Acapulco, Gro.

A ocho años del asesinato del perredista Armando Chavarría Barrera, cometido el 20 de agosto de 2009, cuando era presidente del Congreso local, su viuda, Martha Obeso Cázares, exigió esclarecer los hechos y castigar a los responsables.

El desempeño del titular de la Fiscalía General del estado, Xavier Olea Peláez, representa un agravio y una ofensa para la sociedad, no solamente para la familia de la víctima, sostuvo.

En la presentación del informe Atrocidades innegables: crímenes de lesa humanidad, Obeso Cázares reprochó que nunca ha tenido acceso al expediente de la investigación de quien fue su esposo.

La mujer mencionó que únicamente se ha reunido en una ocasión con el actual fiscal estatal, a quien criticó el lenguaje utilizado recientemente para referirse a la investigación del crimen del presidente del Congreso local. Olea Peláez señaló entonces: he pedido la orden para detener a varios.

¿Cómo se puede expresar así, se trata del expediente de quien era la cabeza del Poder Legislativo?, cuestionó. “Lo anterior representa una ofensa, no como mi esposo, sino para la sociedad entera.

Debemos reclamar la verdad, debemos recuperar la justicia como un bien público en extinción, pidió la viuda de Chavarría Barrera. Recriminó que el expediente de la investigación haya sido manoseado y las líneas de investigación nunca hayan sido aclaradas.

Sin embargo, enfatizó que cuando se cometió el asesinato, pensé que era la atrocidad más grande, después de la muerte de Lucio Cabañas y Genaro Vázquez, ya que en Guerrero se puede matar y desaparecer.

Martha Obeso cuestionó: en Guerrero, ¿dónde vamos a meter tanto dolor?, todos los días tenemos que contar los muertos, e insistió que el asesinato de Armando Chavarría y su falta de investigación, constituye un agravio de categoría histórica.

Añadió que en Guerrero existe una parálisis de las instituciones. No podemos permitir que nos atropelle así la fiscalía, que es la caja receptora de los agravios de la sociedad.