Juchitán, Oax., El obispo emérito de Tehuantepec, Arturo Lona Reyes, celebró ayer 46 años de haberse convertido en purpurado y pidió al gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, ponerse las pilas e impulsar una visión madura de la política, respetuosa de la autonomía de los pueblos indígenas, a quienes defenderá mientras viva. Lona Reyes, quien asegura que los pobres lo evangelizaron, se ordenó sacerdote en 1952, fue nombrado obispo en 1971 y es emérito desde el año 2000. Ha luchado por la educación y el empleo, para lo cual ha creado cooperativas.