l alcalde de Tijuana, Juan Manuel Gastélum, criticó la actuación de tres regidores, dos del Partido Encuentro Social (PES) y uno independiente, de quienes dijo: Ningún chile les embona. Mónica Vega, Manuel Rodríguez y José Manuel Ortiz Ampudia, respectivamente, son los únicos miembros del cabildo que cuestionan los proyectos de la administración panista.

El alcalde decidió que los servicios de recolección de basura y alumbrado público fueran operados por terceros. La basura, vía el alquiler de camiones; el alumbrado público será concesionado por 15 años a una empresa para que instale las lámparas de la ciudad y les dé mantenimiento.

Los regidores del PES solicitaron juicio político contra Gastélum por presunta corrupción en el contrato de arrendamiento de los camiones recolectores de basura. También han revelado un presunto sobreprecio de las lámparas de alumbrado. En todo momento han exigido transparencia en los procesos de arrendamiento y licitación.

Además de los dichos del alcalde, paralelamente se publicó en el semanario Zeta un desplegado con el titulo “El cártel de los sapos”, con las fotografías de los tres regidores y el encabezado ¡En contra de todo y a favor de nada! Los llama oposición enferma non gratos y les advierten que al edil tendrán que ganarle en la arena política electoral. La campaña de linchamiento contra los regidores opositores puede ser un bumerán. Nadie quiere una oposición poco constructiva, pero tampoco falta total de contrapesos. La mayoría de que goza el Partido Acción Nacional en Baja California le permite gobernar sin oposición, pero la falta de una oposición fuerte lo ha convertido en un partido hegemónico que gobierna como lo hacía el Partido Revolucionario Institucional en sus viejos tiempos. Dicen que el poder corrompe y el poder absoluto corrompe absolutamente.