Integrantes de organizaciones sociales y populares realizaron ayer una marcha del Monumento a la Revolución al Hemiciclo a Juárez para manifestar su solidaridad al gobierno de la República Bolivariana de Venezuela.

En medio de consignas por la unidad de los trabajadores y el respeto a la autodeterminación de los pueblos, los inconformes repudiaron la actitud injerencista y vergonzosa del gobierno de México por conducto del canciller Luis Videgaray, a quien acusaron de sumarse a los ataques contra el gobierno venezolano por órdenes de Estados Unidos.

Los manifestantes enfatizaron que los políticos mexicanos no tienen autoridad moral para criticar el proyecto bolivariano o pretender darles lecciones de lo que debe ser la democracia, cuando en el país todos los días se cometen graves violaciones a los derechos humanos.

Óscar Raúl Guzmán, de la Coordinadora Mexicana de Solidaridad con Venezuela, lamentó que desde el sexenio de Vicente Fox las instituciones mexicanas estén jugando el papel de cachorro del imperio estadunidense, asumiendo un papel servil que echa por la borda la tradición diplomática de dignidad y respeto a los procesos políticos de otros países.

Al llegar al Hemiciclo a Juárez, los manifestantes advirtieron que las amenazas del presidente estadunidense, de utilizar la fuerza militar contra Venezuela, debe encontrar respuesta unificada y firme de todas las naciones de América Latina.