Puebla, Pue.

Acercarse a la historia oral, polifónica y coral de la etapa artística del país que va de 1965 a 1982 y habla de movimientos de diferentes colectivos es la finalidad de la exposición Grupo Mira: una contrahistoria de los setenta en México.

Con curaduría de Annabela Tournon, la muestra, que se abrió ayer en el Museo Amparo, propone dar a conocer la producción y el potencial crítico de ese movimiento que amplió las formas artísticas conceptuales y no objetualistas.

Refirió que recupera 500 documentos y obras provenientes de fondos privados, así como de centros de archivos y universidades de México y Estados Unidos.

La exhibición, dijo ocurre nueve años después de la revisión que se hizo en el Museo Universitario Arte Contemporáneo de la Universidad Nacional Autónoma de México, con la muestra La era de la descripción.

Definió que la exposición Grupo Mira... se articula en torno a tres núcleos temáticos y cronológicos que a veces se desbordan, pero que son tres maneras de presentar la historia.

El primer núcleo, añadió, refiere a aquellos artistas del grupo Mira que como estudiantes confluyeron en la Escuela Nacional de San Carlos, así como con creadores chicanos.

En contraste, el segundo remite a Puebla y a lo sucedido en torno a la autonomía universitaria, así como la participación de Óscar Oliva, en 1972, en el departamento de Difusión Universitaria.

El último núcleo alude al grupo Mira y sus acciones de 1972 y 1982, cuya característica principal fue negociar entre lo conceptual y lo mural, haciendo una discusión propia con la gráfica.

Annabela Tournon apuntó que es por ello que este núcleo se titula Una contrahistoria de los setenta en México, que refiere, de paso, a Michel Foucault.

Definió que a esos artistas, los caracterizó su activismo, sobre todo en momentos esenciales como el movimiento estudiantil de 1968 y las reformas universitarias en la presidencia de Luis Echeverría, así como el periodo de sindicalismo independiente.

Eran, añadió la también historiadora del arte y traductora–, artistas, activistas y teóricos de diversas narrativas que ellos contaron desde la historia.

Sicodelia y abstracción

Annabela Tournon explicó que al retomar documentos, la exposición es una historia del movimiento Mira vista desde su materialidad y, por tanto, los archivos mantienen el mismo nivel y se articulan al igual que los objetos.

No se trata de mostrar de lo que están hechos los archivos, sino referir al arte que fue sicodélico y abstracto, acercándose a su materialidad y narrativa.

Mencionó que el grupo Mira recupera a protagonistas de los movimientos, como Arnulfo Aquino, Melecio Galván, Eduardo Garduño, Rebeca Hidalgo, Silvia Paz Paredes y Jorge Pérez Vega.

El grupo Mira produjo un arte dirigido a todos, a trabajadores como al público especializado, en correspondencia con las formas históricas del arte público como el muralismo y la gráfica política, y al mismo tiempo la neovanguardia, el conceptualismo y la crítica institucional, expuso Tournon.

Concluyó que Mira fundó el Frente Mexicano de Grupos Trabajadores de la Cultura, surgido en 1978, así como integrante activo de los grupos artísticos a finales de los años 70 del siglo pasado ampliando el arte a formas más conceptuales.

Destaca que la muestra está acompañada de un libro que reúne la investigación de la exposición con textos de Tournon, Noé Martínez, Julio García Murillo, Marisol Rodríguez y Arden Decker.

Grupo Mira: una contrahistoria de los setenta en México ocupa las galerías 1, 2 y 3 del Museo Amparo (2 Sur 708, Centro Histórico de Puebla) y concluirá el 6 de noviembre. El 16 de agosto, la curadora participará en un debate con integrantes de ese movimiento.