Amaño de partidos y fraude fiscal ensucian una de las ligas más importantes del mundo
Fue capturado junto con su hijo Gorka en el contexto de una operación contra la corrupción
Son acusados de desvío de fondos y cobro de comisiones ilegales por duelos de la Furia Roja
Miércoles 19 de julio de 2017, p. a13
El máximo dirigente de la liga de futbol profesional de España y vicepresidente de la FIFA, Ángel María Villar, fue detenido ayer por agentes de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil española en el contexto de una operación contra la corrupción, el desvío de fondos públicos y el cobro de comisiones ilegales por la celebración de partidos amistosos de la selección española.
Villar, en el cargo desde hace 30 años y que a lo largo de su gestión ha dejado un sinfín de zonas oscuras y presuntas irregularidades, todas ellas relacionadas con la gestión de los recursos económicos, era una de las personas más influyentes en el futbol internacional.
La detención de Villar se suma a un cúmulo de irregularidades, acusaciones de amaño de partidos, investigaciones e imputaciones por fraude fiscal a algunos de los jugadores más importantes de la liga española, como Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, que han llenado de dudas una de las competiciones más importantes en el mundo del balompié internacional.
Desde hace 30 años, Ángel María Villar gobierna con puño de hierro la Real Federación Española de Futbol (RFEF), que es el pilar fundamental de todo lo que tiene que ver con este deporte en España. Desde las competiciones infantiles, a partir de los cinco años, hasta los equipos que forman parte de la Liga de Futbol Profesional (LFP) y, por supuesto, la gestión de las selecciones nacionales, tanto las juveniles y femeniles hasta la selección mayor, que ya conquistó una vez el Mundial de Futbol y dos ocasiones la Eurocopa.
Administración sombría
A pesar de los rumores e investigaciones que ha generado su gestión, siempre ensombrecida por una administración dudosa de los recursos públicos y en ocasiones un descarado despilfarro en viajes a sitios paradisíacos con gastos lujosos y desorbitantes, Villar siempre se ha mantenido firme en su silla. Era el hombre que controlaba todo lo importante que tenía que ver con el deporte rey de España. Por eso la mayoría de los presidentes de los principales equipos españoles, como el Real Madrid, el Barcelona o el Atlético de Madrid, siempre lo han apoyado y han votado por la continuidad de su gestión. Muy pocos, al menos hasta ahora, se han atrevido a cuestionar su liderazgo y a señalar las numerosas presuntas irregularidades que han ocurrido durante las tres décadas de su poder omnímodo.
Finalmente ayer, en una operación secreta y de la que nadie sabía los detalles, salvo los responsables de la investigación, Villar y su hijo Gorka Villar –abogado y gestor de la RFEF– fueron detenidos bajo el amparo y la autorización del juez de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz, gracias a una investigación de la Guardia Civil coordinada con la Fiscalía Anticorrupción. También fueron capturados Juan Padrón, vicepresidente económico de la RFEF, y el secretario general, Ramón Hernández Baussou.
El meollo de la investigación es el desvío de fondos de la RFEF hacia el presidente y su hijo, quienes habrían cobrado comisiones ilegales por la celebración de partidos amistosos de la selección española de fut- bol. Tras pactar los encuentros con los máximos mandatarios de otras selecciones internacionales, las federaciones de esos países abonaban falsos servi- cios de asesoramiento al directivo de la RFEF y a su hijo a través de empresas de este último.
Los partidos investigados son el amistoso que jugaron España y Corea del Sur el primero de junio de 2016 en el estadio Red Bull Arena de Salzburgo (Austria), preparatorio para la Eurocopa de Francia de 2016. Pero la lista de encuentros bajo sospecha es mucho más larga.
También se indaga el partido que disputaron Argentina y España el 7 de septiembre de 2010 en Buenos Aires, sólo unas semanas después de que España se proclamó campeón de la Copa del Mundo en Sudáfrica.
También se investiga a Villar por utilizar su influencia para conseguir que su hijo fuera nombrado director general de la Confederación Sudamericana de Futbol (Conmebol). Ocupó el cargo entre 2014 y 2016, periodo que coincide con la eclosión de multitud de casos de corrupción en ese organismo. Además, la fiscalía de Uruguay lo acusa de extorsionar a clubes de ese país que denunciaron la venta a la baja de los derechos televisivos de los torneos sudamericanos internacionales. Los agentes españoles han registrado oficinas y delegaciones de la RFEF, así como las oficinas de Gorka Villar en la que habría documentación sobre las empre- sas desde las que cobró las supuestas comisiones ilegales.
Villar y sus colaboradores más cercanos no es la primera vez que se enfrentan a la justicia. Ya ha sido investigado por el supuesto trato en favor del equipo de futbol andaluz Recreativo de Huelva –siempre a cambio de dinero– y al Marino, de la isla de Tenerife, además de otra investigación que se abrió y se archivó por el supuesto fraude de más de un millón de euros al erario público cuando organizó un partido amistoso en Haití, que supuestamente tenía una motivación filantrópica.
Otros escándalos
La detención de Villar se suma a una larga y escandalosa lista que en los recientes años ha cuestionado la limpieza de la LFP, una de las más vistas en el mundo.
Uno de los asuntos más escabrosos y que han indignado más a una buena parte de la sociedad española es el fraude fiscal generalizado no sólo de los equipos de futbol profesional, que tienen una deuda con la Hacienda Pública cercana a los 500 millones de euros, sino también sus grandes figuras han sido noticia por la evasión y el fraude fiscal.
Por ejemplo, el considerado mejor jugador del mundo y estrella del Barcelona, Leo Messi, fue procesado y condenado por un fraude fiscal de más de cuatro millones y medio de euros. No fue a la cárcel, pero sí condenado a una multa millonaria. Actualmente está siendo procesado la otra gran figura de la liga española, el portugués Cristiano Ronaldo, quien está acusado de evasión fiscal por más de 14 millones 500 mil euros, por el que podría tener una pena de cárcel de hasta siete años. Y así la lista de jugadores con problemas fiscales se extiende a todos los equipos y a los jugadores más variopintos, además de algunos entrenadores que han pasado por el futbol español, como el también portugués José Mourinho, actualmente entrenador de Manchester United.
A esto hay que agregar los escándalos recientes de amaño de partidos y hasta de la vinculación de la mafia italiana en el resultado de algunos encuentros de futbol, todo ello por el jugoso negocio de las apuestas. Sólo el año pasado se calcula que en las competiciones de la Segunda B y la Tercera del futbol español se habrían amañado alrededor de 50 partidos, para lo que incluso se presentaron pruebas que fueron admitidas por la justicia y están siendo investigadas.
Con la detención de Villar el escándalo crece y se ensucia aún más una liga muy cuestionada en los recientes años por tantas irregularidades y malos hábitos.