En la renegociación del Tratado de Libre Tratado de América del Norte (TLCAN), la industria de los dispositivos médicos en México, concentrada en trasnacionales y abarca desde la fabricación de materiales de curación y prótesis hasta modernos aparatos tecnológicos para el diagnóstico de enfermedades, demanda el trato equitativo entre empresas que realizan inversiones, que se excluyan requisitos y que el gobierno de México realice licitaciones públicas de estos productos acorde con el acuerdo.

El sector ha sido uno de los más favorecidos en el TLCAN, ya que registra un crecimiento promedio de 2.4 por ciento anual, aporta 0.4 por ciento del producto interno bruto de México y 60 por ciento de sus artículos se exportan a Estados Unidos, indicó Ana Riquelme, directora ejecutiva de la Asociación Mexicana de Industrias Innovadoras de Dispositivos Médicos (AMID), creada hace una década y a la que pertenecen 32 empresas globales o multinacionales, principalmente de origen estadunidense y europeo.

La mayoría de los dispositivos médicos en México se fabrica en maquiladoras y 80 por ciento de los insumos que utiliza el sector son importados. Por el grado de dificultad médica de la materia prima que además está altamente regulada en el mundo, la gran mayoría de esos insumos es de origen extranjero y son provistos por las casas matrices de las firmas que operan en México, señaló la ejecutiva, aunque acota que colaboran con las autoridades para desarrollar una proveeduría nacional.

La AMID ya envió sus propuestas para renegociar el TLCAN a la Secretaría de Economía.