La implementación de los nuevos planes de estudio para la educación media superior demandará un lapso mínimo de cinco años para garantizar que se aplique correctamente en las aulas, donde acuden casi 6 millones de adolescentes y jóvenes en el país, indicó la Secretaría de Educación Pública (SEP).

Las primeras evaluaciones de esta propuesta curricular deberán realizarse en 2024, una vez que se cumpla su sexto año de aplicación, a fin de contar con una revisión articulada del avance de los estudiantes en el trayecto educativo de la formación básica, por lo que corresponderá a la siguiente administración federal medir sus resultados.

En el documento Plan de estudios de referencia del componente básico del marco curricular común de la educación media superior señala que existen evidencias de que el actual modelo educativo para bachillerato no responde a las necesidades de los jóvenes.

Por ello, destaca, se propone adecuar los programas de las asignaturas del componente de formación básica del bachillerato general y tecnológico en todos los campos disciplinarios –matemáticas, comunicación, ciencias sociales y experimentales y humanidades–, en los que se definirán los llamados aprendizajes clave. Además, de que se integrará en la currícula el desarrollo de habilidades socioemocionales.

También se buscará el fortalecimiento del marco curricular común y el desarrollo de aprendizajes esperados de forma gradual y con secuencia de contenidos, y favorecer la transversalidad interdisciplinaria en todas las asignaturas.

En su balance del modelo vigente, destaca que la enseñanza se encuentra dirigida de manera estricta por el profesor, es impersonal, homogénea y prioriza la acumulación de conocimientos, y no el logro de aprendizajes profundos. El conocimiento se encuentra fragmentado por semestres académicos, clases, asignaturas y se prioriza la memorización y la consecuente acumulación de contenidos desconectados, advierte.

Por ello, enfatiza que en este nivel educativo, donde cerca de 450 mil jóvenes desertan cada año de acuerdo con cifras oficiales, se debe superar la desconexión existente entre el currículo, la escuela y los alumnos. Afirma que se requieren contenidos pertinentes y dinámicos, en lugar de los planes vigentes segmentados y limitados por campo disciplinar.

La SEP, a través de la Subsecretaría de Educación Media Superior, reconoce que la Reforma Integral de la Educación Media Superior (RIEMS) cumplió su propósito inicial. Sin embargo, señala que los resultados de las evaluaciones dan cuenta de que el esfuerzo no ha sido suficiente y que no se ha progresado en el desarrollo de competencias que son fundamentales para el desarrollo de las personas y la sociedad.

La dependencia destaca que la modificación curricular se apoyará en tres ejes prioritarios: definición del perfil del egresado; actualización de las competencias genéricas y disciplinares; y la actualización de los contenidos en planes y programas de estudio, en los que se buscará la profundización de los aprendizajes, evitar la dispersión de contenidos, orientar mejor la práctica docente y favorecer la transversalidad interdisciplinaria.