El director del Conacyt, Enrique Cabrero, dijo a estudiantes y académicos que demandaron mayores recursos para becas de posgrado que, a pesar del recorte presupuestal este año, hubo un incremento de 32 por ciento en el número de becarios, y en los primeros cuatro años de esta administración, se pasó de 46 mil 800 a 63 mil becas.

Al participar en el conversatorio El otro lado de la moneda: desafíos del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, organizado por el Senado, en el que participaron académicos, autoridades educativas, becarios, donde estudiantes mostraron carteles en los que se leía: Becas para todos, No al recorte de becas, Becas sí, recortes no, Cabrero sostuvo que a largo plazo es muy difícil pensar que sólo Conacyt atienda a todos los solicitantes de becas; eso no ocurre en ningún país del mundo, y menos con recortes al gasto educativo.

El investigador José Antonio de la Peña señaló que una responsabilidad que debiera tener y que no veo que haya asumido el Conacyt es ser más propositivo en los temas en que los estudiantes son becados. México necesita aumentar ingenieros nucleares, eso es muy claro, pero falta que se tome la decisión de si van a existir becas para ello.

Acusó De la Peña: Se sigue becando a estudiantes de maestría en España e Inglaterra, donde México es muy superior en esos temas, en muchas maestrías el país es muy superior; creo que eso va en detrimento de las becas en sí, puesto que los estudios en el extranjero son muy caros.

Cabrero respondió al investigador que “Conacyt no da becas a programas patito. Los programas son evaluados por comités científicos; creo que el consejo debe ser más claro en algún momento respecto a los temas que sí va a apoyar y los que va a favorecer menos”.

Insistió que “no hay programas patito apoyados por Conacyt ni en México ni en el extranjero; somos muy cuidadosos, rigurosos en seleccionar las universidades, que estén en los primeros lugares del ranking, y son esos los posgrados que estamos apoyando. Somos muy selectivos en las instituciones y en los alumnos que solicitan becas”.

Aseveró que si los legisladores duplicaran el presupuesto de un año para otro a la institución, difícilmente podríamos utilizarlo porque nos falta capital humano altamente calificado en el ámbito de la ciencia, en el profesional, en las empresas.