Sábado 8 de julio de 2017, p. 2
Hamburgo.
Los gobiernos de México y Estados Unidos acordaron aquí seguir muy atentos
la evolución de la crisis política en Venezuela y coadyuvar en la manera en que sea posible
a su solución.
Así como ocurrió la víspera en París con Emmanuel Macron, el tema venezolano también fue parte de la agenda de conversación entre los presidentes Enrique Peña Nieto y Donald Trump.
En declaraciones a la prensa, el canciller Luis Videgaray resaltó la gravedad de los hechos que están ocurriendo
en el país sudamericano, y particularmente –añadió– lo sucedido el pasado miércoles con la agresión a la sede de la Asamblea Nacional y hacia algunos legisladores.
Reiteró la absoluta condena
a ese acto de violencia, porque se vulneró la integridad y autonomía del Poder Legislativo.
Venezuela, indicó el canciller, es un “tema fundamental’’. Y tan lo es para el gobierno mexicano que desde el miércoles, cuando ocurrieron los hechos en la Asamblea Nacional, tanto el presidente Peña Nieto como el propio Videgaray se han referido al mismo.
Ayer este último ubicó además las coincidencias entre distintos gobiernos hacia los hechos en Venezuela. ‘’Estamos absolutamente de acuerdo con Argentina, como lo estamos con España, Canadá o Brasil, y por supuesto ha sido y será parte de las conversaciones entre los mandatarios en este espacio del G20”, apuntó Videgaray.
En París, el jueves y luego de hablarlo con Macron, el jefe del Ejecutivo mexicano apeló a la voluntad de los venezolanos para resolver entre ellos sus diferencias y sobreponerse a las mismas.