El conteo rápido falló en Coahuila porque el comité técnico asesor se apresuró a declarar consistente la muestra con apenas 56 por ciento de las casillas, donde resultó que tenía mayor influencia el candidato del PAN, informó Marco Antonio Baños, consejero del Instituto Nacional Electoral (INE).

En rigor, la muestra no está mal hecha. Lo malo fue la decisión de dar a conocer el conteo rápido sólo con 56 por ciento, explicó el consejero, con lo que empiezan a despejarse algunas dudas de lo ocurrido hace 21 días en dicha entidad.

Si se esperan una hora, la muestra de casillas hubiese sido más amplia, de 80 por ciento, y ahí habría quedado más clara la tendencia de la votación, porque se sumarían casillas que estaban en zonas más alejadas, de mayor influencia del candidato del PRI.

Baños fue tajante al responsabilizar de ese fallo al comité técnico asesor para el conteo rápido en Coahuila, que estuvo integrado por los académicos María del Pilar Alonso Reyes, Rina Ojeda Castañeda y José Reyes Valdés.

Refirió: el comité se apresuró en decirle a la consejera presidenta (Gabriela de León) que la muestra era consistente y que con eso podían salir a dar los resultados. Esto ocurrió a las 2:05 de la madrugada del 5 de junio.

Comentó que los porcentajes de casillas que se contabilizan en los conteos rápidos en varias elecciones superan 80 por ciento, incluso 90, en las federales.

El problema de dicho conteo rápido –el primero en México que da estimaciones diferentes a los resultados finales– fue que colocó en un intervalo más alto al panista Guillermo Anaya: entre 36.4 por ciento y 39.09 por ciento, pero en el Programa de Resultados Electorales Preliminares quedó en segundo lugar, con 36.81 por ciento, y en los cómputos con 38.19.

En tanto, el priísta Miguel Ángel Riquelme Solís apareció abajo en el conteo rápido (entre 34.75 y 37.34 por ciento) mientras en el PREP resultó ganador con 38.31 y en los cómputos con 38.19 puntos.

Esta información está incluida en el Informe sobre los Conteos Rápidos para las Elecciones de Gobernador elaborado por el INE, que se analizará el lunes con los representantes de partidos.

Sin embargo, no menciona nada sobre la responsabilidad del comité y se centra en explicar por qué sólo se contabilizaron 379 de las 694 casillas esperadas.

Señala que los capacitadores se entretuvieron en atender los siguiente problemas: “hubo deserción de funcionarios de casilla por enojo o cansancio, dificultad de los funcionarios para concluir los procedimientos, presión de representantes de partidos y candidatos independientes, distancias considerables entre las casillas de la muestra, lo que imposibilitó o retrasó el reporte de la información al call center”. También hubo dificultades técnicas del equipo o de la compañía de telefonía celular para establecer comunicación con el call center.

Por ultimo, menciona confusión en el método de transmisión de los resultados que los capacitadores que debían ocupar para el envío de imágenes al PREP y la llamada para el conteo rápido.