Jueves 22 de junio de 2017, p. 36
La atención de niños con cáncer requiere ser fortalecida con una mayor cantidad de especialistas en oncología pediátrica y de entrenamiento para los médicos de primer contacto en la detección de este mal, afirmó el secretario de Salud, José Narro Robles.
El funcionario visitó ayer las instalaciones de Casa de la Amistad para Niños con Cáncer, institución de asistencia privada que apoya a pacientes y sus familias de escasos recursos, donde resaltó la importancia de la detección temprana de los tumores malignos, los cuales representan la segunda causa de muerte entre los menores de 15 años de edad.
De acuerdo con especialistas, las neoplasias más frecuentes en ese sector de la población son la leucemia linfoblástica aguda, linfomas Hodgkin y no Hodgkin, el neuroblastoma y el cáncer en sistema nervioso central, de riñón y en hueso.
Ante colaboradores de la agrupación, Narro señaló que continuamente se mejora la capacidad diagnóstica y resolutiva de los hospitales e institutos que dependen de la Secretaría de Salud.
Sobre el trabajo de Casa de la Amistad reconoció que con su apoyo, los niños logran un mayor apego a sus tratamientos. Recordó que 40 por ciento de ellos los abandonan debido a las barreras económicas y de distancia, las cuales se originan por su condición social.
Alivia carencias
En Casa de la Amistad, los niños y sus familiares tienen un espacio que brinda servicios gratuitos de hospedaje, alimentación, traslado a hospitales, ropa, despensa, apoyo emocional y educativo, entre otros.
Después de realizar un recorrido por las instalaciones de esa institución, el secretario de Salud afirmó que ese trabajo debe servir como estímulo para continuar y mejorar la coordinación con otros grupos de la sociedad civil en beneficio de la niñez.
Por su parte, el presidente del patronato de Casa de la Amistad, Alberto Torres Durazo, comentó que el objetivo es elevar el índice de sobrevida de niños y jóvenes en el país.
Además de los servicios mencionados, en este lugar los niños también reciben asistencia integral y medicamentos sin costo. De tal manera que sus familiares únicamente se ocupan de darle continuidad al tratamiento oncológico.
Torres Durazo resaltó que la institución atienden a más de 900 pacientes en tratamiento y calculó que 30 por ciento de los menores son atendidos en hospitales públicos.