Un acuerdo de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) por el que se pretende modificar la Norma Oficial Mexicana (NOM) de combustibles puede llevar a que empeore la calidad del aire en todo el país, de acuerdo con organizaciones ecologistas y sociales.

En un comunicado, el Centro Mexicano de Derecho Ambiental, Greenpeace, El Poder del Comsumidor, Transita Seguro y el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) señalaron que con el acuerdo publicado el pasado 12 de junio sobre la NOM-016-CRE-2016, especificaciones de calidad de los petrolíferos, la CRE pasa por encima de los esfuerzos de actores privados, gubernamentales y de la sociedad civil que buscan mejorar la calidad del aire.

Indicaron que es sorprendente que la comisión pretenda aprobar un incremento hasta de 10 por ciento en el volumen de etanol como oxigenante en gasolinas, en atención a motivos meramente comerciales.

Más ozono y micropartículas

Explicaron que en la actual NOM-016 dicho producto está restringido en las zonas metropolitanas de Monterrey, Guadalajara y valle de México; para el resto del país se determinó un volumen máximo de 5.8 por ciento. Dicha restricción fue establecida por la CRE a partir de evidencia concreta, tanto de laboratorio como empírica a escala global, que demuestra que el uso de etanol en las gasolinas incrementa de manera importante los niveles de ozono y micropartículas en las ciudades, lo que ocasiona mala calidad del aire y con ello daños al medio ambiente y la salud de las personas, indicaron las organizaciones.

Agregaron que la propia CRE citó estas evidencias en la justificación de la decisión de restringir el uso de etanol como oxidante, que fue tomada apenas el año pasado. De ahí que ahora sorprenda que de manera abrupta ignore estos argumentos y pretenda aprobar el aumento en el volumen.

El acuerdo de la CRE conserva la prohibición al uso de etanol en las zonas metropolitanas de Monterrey, Guadalajara y valle de México, pero deja de lado por lo menos analizar la conveniencia de este incremento en otras regiones del país, las cuales, si bien no forman parte de estas tres áreas metropolitanas, presentan de igual forma problemas de calidad del aire y altos niveles de ozono que afectan de manera importante la salud y bienestar de la población, plantearon.

Las organizaciones firmantes exigieron respeto a los derechos humanos que tenemos todas y todos a la salud, al medio ambiente sano y a la información, transparencia y participación libre e informada en la toma de decisiones de asuntos de interés nacional.