La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) manifestó su preocupación por la llegada del militar retirado Julián Leyzaola Pérez como asesor operativo de Seguridad Pública del municipio de Benito Juárez (Cancún), Quintana Roo, pues está acusado de cometer violaciones a las garantías básicas como servidor público.

En comunicado, el organismo recordó que cuando se desempeñaba como secretario de Seguridad Pública en Tijuana, Baja California, Leyzaola enfrentó cuatro denuncias por supuestos abusos.

De igual forma, existe una averiguación previa en su contra, ante la Procuraduría General de la República, una carpeta de investigación ante la Fiscalía General de Chihuahua y otra de carácter administrativo en el ayuntamiento de Ciudad Juárez.

Todas las indagatorias derivaron de las recomendaciones 87/2011 y 12/2015 emitidas por la CNDH, mismas que no se han cumplido a cabalidad.

Por lo anterior el ombudsman nacional, Luis Raúl González Pérez, le envió un oficio al alcalde de Benito Juárez, Remberto Estrada Barba, en el cual le solicitó que tome las providencias necesarias para evitar que sus gobernados sufran violaciones a sus derechos derivadas del trabajo de Leyzaola.

La seguridad pública no se logra violentando los derechos humanos. No es la arbitrariedad la que debe reinar para mantener el orden, pues esa es característica de los estados despóticos y autoritarios, subrayó el presidente de la CNDH.

El organismo recordó que su recomendación 87/2011 tiene origen en hechos ocurridos en marzo de 2009, cuando se privó de la libertad, en las oficinas de la Secretaría de Seguridad Pública de Tijuana, a dos civiles y 23 policías municipales, los cuales fueron torturados.

La recomendación 12/2015 surgió por hechos ocurridos en abril de 2012, cuando seis policías municipales de Ciudad Juárez, Chihuahua, detuvieron de manera arbitraria y con uso excesivo de la fuerza a cinco personas, de las cuales cuatro fallecieron al ser ejecutadas a tiros.

Dos semanas después del nombramiento del militar como nuevo asesor operativo de Seguridad Pública en Cancún, pese a su amplio currículum, la violencia se ha incrementado en el principal destino turístico del país y América Latina. Antes de ser presentado por el alcalde Estrada Barba, las estadísticas indicaba que había dos ejecutados a la semana en promedio; desde la llegada del policía, la cifra se elevó a cinco.