La familia de Belén Montserrat Cortés Santiago, estudiante de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, presentó ante la Comisión de Derechos Humanos (CDHDF) local una queja para que se exija a la Procuraduría General de Justicia (PGJ) capitalina seguir con la investigación hasta dar con el parado de la estudiante de comunicación y cultura.

El Centro de Atención de Personas Extraviadas y Ausentes les informó que el caso fue cerrado, luego de la declaración pública que hiciera el procurador capitalino Rodolfo Ríos sobre la localización de la joven de 19 años, no obstante, para la familia sigue ausente, por ello recurrieron al organismo defensor de derechos humanos.

El documento fue entregado el pasado viernes y se integró a la investigación de oficio que abrió la primera visitaduría de la CDHDF, porque la familia se enteró por los medios sobre la localización de la estudiante.

Cuestionada sobre si actúo conforme a derecho la procuraduría capitalina al reservar la información de la ubicación de la joven, Perla Gómez, presidenta de la CDHDF, expresó que documentarían, con niveles de confidencialidad, porque no se informó a la familia del paradero de Belén, respetando también la voluntad de las partes que pudieran estar involucradas, con el fin de no generar una afectación mayor.

Precisó que “hay que saber primero si es real que la persona –Belén– no quiere ser identificada; segundo, por qué razón es que no quiere, que podría ser éste un reporte adicional cuando vemos otro tipo de contextos”.

Gómez aclaró que no se prejuzga el caso, pero la CDHDF puede observar lo que ha hecho o dejado de hacer la procuraduría; sí acercarnos, porque eso sí lo podemos solicitar con los niveles también de confidencialidad, a la persona involucrada y ver en este caso que haya una claridad para todas las partes.

Días antes, la presidenta manifestó que ya se habían hecho todos los requerimientos de información que nos permitirá determinar si hay alguna omisión o acción que pudiera generar una violación a derechos.