Profesores, amigos y padres de Belén Monserrat Cortés Santiago, estudiante de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM), se manifestaron frente al edificio de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) capitalina y aseguraron que la joven de 19 años sigue ausente.

Pese a que el titular de la dependencia, Rodolfo Río Garza, declaró la semana pasada que Belén ya había sido localizada viva y en buen estado de salud, su familia señaló que es falsa la versión, porque no ha llegado a casa y no tenemos noticias de ella, expresaron sus padres.

Cerca del mediodía, un grupo de personas se concentró en la calle Gabriel Hernández y Doctor Río de la Loza, en la colonia Doctores, para exponer que la joven desapareció el 29 de abril y aún sigue desaparecida, por lo que entregaron una solicitud con 200 firmas para que continúe la investigación.

El 25 de mayo, Rodolfo Ríos Garza informó que policías de investigación del Centro de Apoyo a Personas Extraviadas y Ausentes (Capea) de la PGJ localizaron a la estudiante de la carrera de comunicación y cultura, y que fue ella quien decidió ausentarse de manera voluntaria de su domicilio, y por respeto a su privacidad no emitiría más información.

Asimismo, aclaró que no fue víctima de un delito y que personas cercanas a ella sabían que se iba ausentar del domicilio familiar.

Sin embargo, los padres de Belén afirmaron que no han tenido contacto con ella y que personal del Capea les mostró una fotografía, la cual obra en el expediente como prueba de que está bien y fue ubicada, pero ello no les es suficiente ante la incertidumbre de no saber donde está.

Ayer, padres y hermanos pudieron conocer la investigación que realizó la dependencia. Tuvieron acceso al expediente, pero al consultar los datos que dejó la joven, encontraron que la información del lugar donde se encuentra fue reservada, porque les informaron que ella así lo decidió y se debe respetar la privacidad, porque se trata de una persona mayor de edad.

No obstante, indicaron que seguirán insistiendo en su búsqueda hasta dar con su paradero y verificar que se encuentra bien.

Por otra parte, la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal ya investiga si la actuación de la PGJ al reservarse la ubicación de la joven no es una violación a los derechos humanos y solicitará conocer dónde se encuentra la joven, con la secrecía que requiere el caso, para respetar, si es así, el derecho de estar ausente.