Puebla, Pue.

Agentes de la Procuraduría General de la República (PGR) arribaron la tarde del jueves a la intersección de las avenidas Reforma, Camino Nacional y 10 Sur, de Palmarito Tochapan, municipio de Quecholac, Puebla, donde el pasado 3 de mayo un presunto soldado disparó en la cabeza a un hombre desarmado.

Los peritos recabaron pruebas sobre el enfrentamiento ocurrido entre elementos del Ejército y presuntos huachicoleros (ladrones de combustible), que dejó seis civiles y cuatro soldados muertos, 12 heridos y 14 personas detenidas.

Durante un recorrido efectuado por La Jornada de Oriente, se constató que tres patrullas de la Policía Federal y un vehículo Hummer con soldados colocaron un retén de vigilancia en la autopista Puebla-Orizaba.

Mujeres de Palmarito Tochapan arribaron al lugar donde los agentes realizaban pruebas de balística para exigir que las fuerzas armadas se retiren de esta junta auxiliar de Quecholac.

Rechazaron que niños de Palmarito fueran usados como escudos humanos por los huachicoleros que emboscaron al Ejército el 3 de mayo pasado. ‘‘¡Que no digan que cobramos 12 mil pesos y trabajamos para ellos! ¡Trabajamos el campo, no tendríamos estos zapatos!’’, exclamó una de las manifestantes.

Denunciaron que una banda de ladrones de ductos, que lidera un sujeto apodado El Ruso, mantenía amenazada a la población de Palmarito y ‘‘ahora que ya se fueron (los delincuentes) vamos a hablar para que se sepa la verdad; ya no tenemos miedo, pero ¡no queremos ni Ejército ni huachicoleros!’’

Acompañadas por sus hijos, denunciaron que los soldados han realizado en días recientes allanamientos a sus casas, pues ingresan de forma violenta sin exhibir órdenes de cateo en la búsqueda de presuntos delincuentes y tomas clandestinas en ductos de Petróleos Mexicanos.

Aseguraron que los soldados han apuntado a los pobladores con sus armas y se comportan ‘‘con agresividad’’ en caminos y carreteras, pues a punta de rifle e insultos obligan a los ocupantes de vehículos a descender para hacerles revisiones.

Un juez de control de Puebla vinculó a proceso a los nueve detenidos por la agresión a militares durante el enfrentamiento del 3 de mayo en Palmarito Tochapan, municipio de Quecholac, Puebla.

Son acusados de homicidio calificado, homicidio en grado de tentativa, delitos contra servidores públicos, portación ilegal de arma de fuego y de proyectiles útiles. La autoridad judicial resolvió que la justicia federal debe definir su situación legal.