ste sábado 29 de abril, mientras los habitantes de la Ciudad de México vivían difíciles días a causa de la delincuencia desatada, su jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, comía tacos en Hermosillo, Sonora, como parte de una extraña visita durante la cual pudo ser captado en fotografías con sombrero en una reunión con ganaderos del estado y en compañía de altos representantes del beltronismo: la gobernadora Claudia Pavlovich, el senador por el Partido Verde Pablo Escudero y la esposa de éste, Sylvana Beltrones, hija del decisorio Manlio Fabio.

Ayer, en Jojutla, Morelos, tal como en esta columna y en otros espacios astillados se había adelantado, y como lo sugería la súbita visita de negociaciones a Hermosillo, Mancera fue designado presidente de la Confederación Nacional de Gobernadores, la menguante Conago que, sin embargo, y aun cuando casi nada verdaderamente se decide o procesa en ese club de amigos, servirá al mandatario capitalino como escaparate, para efectos mediáticos, y como plataforma para su calculada candidatura presidencial apartidista, aunque con el sabido apoyo del Partido de la Revolución Democrática, en el que mantiene como presidenta a Alejandra Barrales Magdaleno.

Nada hace suponer que Mancera crecerá en intención de votos para colocarse como serio aspirante a la Presidencia de la República, pero el abogado que fue procurador de justicia en la Ciudad de México tiene la vista puesta en confirmar al partido del sol azteca como instancia de dispersión del voto opositor en 2018, lo cual podría generar benevolencias varias para el PRD y para el candidato independiente Mancera (eventual secretario de un gabinete de coalición, si ganaran los candidatos del PRI o del PAN), quien busca construir un cuarto polo con otras figuras regionales, cuya participación no está aún convenida.

Por lo pronto, Mancera ya preside la multimencionada Conago, relevando a otro personaje de habilidades políticas escalatorias y posturas camaleónicas, Graco Ramírez, el perredista que ha llevado a Morelos a impensables niveles de desastre, superando a varios de sus impugnados antecesores. En la reunión de gobernadores, Enrique Peña Nieto no pudo refrenar su proclividad a enviar mensajes indirectos a su principal opositor, Andrés Manuel López Obrador, pues hizo un llamado a respetar las instituciones ya que, aseguró, somos un país que define sus gobiernos a partir del ejercicio democrático.

Felipe Calderón Hinojosa se mostrará respetuoso de la institución panista cuando menos hasta después de las elecciones estatales de junio próximo, según la interpretación que hace el dirigente del partido de blanco y azul, Ricardo Anaya, de una especie de pacto interno de sus cúpulas para mantenerse unidos en tanto se desahogan los procesos electorales de Coahuila (donde Calderón espera la poco probable victoria de su compadre Guillermo Anaya), Nayarit (donde todo hace indicar que ganará el PAN, como si estuviera negociado), Veracruz (con elecciones municipales en las que el gobernador Yunes Linares tratará de frenar a Morena) y el estado de México (donde Josefina Vázquez Mota no levanta, y el duelo final se cierra entre un Primazo declinante y una Delfina que, a pesar de los descuentos municipales en Texcoco, sigue adelante).

A propósito de Morena: la diputada federal por un distrito de Veracruz, Rocío Nahle, quien además coordina la bancada del partido lopezobradorista en San Lázaro, pidió a la sociedad mexicana en general, y a los veracruzanos en particular, que disculpen lo sucedido en el caso de Eva Cadena, la diputada local y ex candidata a presidenta municipal de Las Choapas, quien se volvió indefendible cuando le sacaron un tercer video de arreglos corruptos, recibiendo fajos de billetes para mover sus influencias legislativas en el sentido indicado por los compradores de su voluntad.

No es usual que en Morena se reconozca de manera palmaria una equivocación de esa magnitud, de tal manera que resulta positivo cambiar la narrativa original, que pretendía adjudicar todo a un complot, sin que en los primeros episodios de esta historia se hubiera arriesgado una pizca de autocrítica en el asunto, hacia la aceptación de que hubo un error al admitir a la multipartidista Cadena y su vertiginosa conversión en candidata.

Nahle dijo también que el expediente Cadena obligará a Morena a endurecer los filtros y mecanismos de postulación de candidatos. La secretaria general del comité nacional morenista, Yeidckol Polevnsky, hizo consideraciones similares y, al anunciar las medidas que se tomarán, reconoció de manera implícita los descuidos y fallas en esos procesos. Para esa formación política, tan encaminada a la obtención de importantes cargos de elección popular, resultaría muy buena medicina esa depuración oportuna, siempre y cuando vaya más allá de las palabras.

En Reynosa, Tamaulipas, se han institucionalizado los enfrentamientos callejeros entre bandos criminales que se disputan la plaza y, en otros términos, contra fuerzas armadas de diversa graduación. Entre la noche del martes y la madrugada del miércoles se produjeron en aquella ciudad fronteriza múltiples actos delictivos, con el constante disparo de armas de alto poder, en una más de las noches de terror que se dan en esa población y en otras más de Tamaulipas, una entidad en la que los cárteles nativos, y sus posteriores divisiones y derivaciones, no muestran ningún respeto por leyes, gobernantes ni policías o militares.

El gobernador, de origen panista, Francisco García Cabeza de Vaca, solamente hace declaraciones, entre ellas la de irse a vivir una temporada a la propia Reynosa. En tanto, ayer no hubo clases escolares, el transporte urbano canceló servicios y las maquiladoras y otros negocios prefirieron cerrar. Ah, el boletín oficial reporta que hubo (sólo) un muerto y algunos robos de vehículos, a pesar de que en Reynosa se vivió una batalla entre narcos, con camionetas con siglas de alguno de los grupos paseándose por la ciudad y atacando a sus adversarios. ¡Hasta mañana!

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