El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) informó de la adquisición y puesta en marcha de un equipo láser de mínima invasión para eliminar cálculos renales de derechohabientes adscritos al Hospital General de Zona número 24 en la Ciudad de México. Este es el primer nosocomio de segundo nivel de atención que cuenta con esta tecnología, donde se atenderá a más de 200 personas que están en lista de espera, indicó el urólogo Antonio Rodríguez Hernández. Explicó que el procedimiento dura de 30 a 60 minutos y consiste en la introducción de una cámara o lente dentro de un tubo o endoscopio, sin necesidad de hacer una incisión o corte al paciente. El equipo entra por el tracto urogenital hasta llegar al riñón y con una fibra que guía el rayo láser hacia la piedra (cálculo renal), la cual se pulveriza mediante ondas de choque. La arenilla resultante del procedimiento es desechada por la orina. Cuando las piedras son grandes, en la cirugía se fragmentan y se retiran mediante una incisión pequeña, señaló el especialista. Dijo que cuando las personas desarrollan cálculos renales presentan infecciones frecuentes en vías urinarias, dolor en colon y la región lumbar. Cuando una piedra se desprende puede obstruir el conducto por donde sale la orina del riñón, lo cual, a su vez, provoca un dolor muy fuerte e intenso que lleva a los afectados a requerir atención médica de urgencia.