El futuro del turismo
ientras Donald Trump piensa cómo atraer empresas industriales y del sector primario a Estados Unidos, el futuro del empleo y la riqueza se orienta al avance tecnológico y los servicios, entre los que destaca el turismo.
El crecimiento de ese sector es exponencial y deja una derrama de recursos creciente. Mientras en 1950 viajaron 25 millones de turistas a escala internacional, en 2015 lo hicieron mil 260 millones. Es decir, ahora hay 50 veces más paseantes a escala global que hace 65 años, y para 2030 se esperan mil 800 millones de viajeros por el mundo.
El turismo global ya representa 7 por ciento de intercambios totales de bienes y servicios, y sólo las exportaciones de hidrocarburos y productos químicos representan más recursos en los intercambios que los de los viajeros, pero el crecimiento de ese sector es mucho mayor que el de los otros dos, por lo que en unos años ocupará el primer lugar.
Hace apenas cinco décadas, quienes viajaban al extranjero en plan de turismo eran las personas acaudaladas y la naciente clase media. Ahora la clase media se ha multiplicado y viaja con gran facilidad. Un fenómeno paralelo es el de la apertura de países como China, Rusia, Bulgaria y República Checa, que tienen un crecimiento acelerado. De hecho, China, Estados Unidos y Reino Unido ocupan los tres primeros lugares en turismo emisor.
Para México y, en general, países como el nuestro, la recepción de turistas crece en forma más acelerada que en las naciones desarrolladas, lo cual es una gran ventaja, ya que aunque Estados Unidos se salga del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, el turismo que visita lugares como Puerto Vallarta, Cancún, Acapulco o Ciudad de México no se frenará.
Sin duda tenemos problemas graves que resolver para convertirnos en una potencia turística, como la inseguridad, el control de algunas zonas por mafias con gran poder y falta de infraestructura para atender a los diversos niveles de turistas y a las culturas que desconocemos en el sector, como la China. Sin embargo, la industria turística será uno de los grandes motores del desarrollo de nuestro país en las próximas décadas.
