Raúl Potro Gutiérrez, ex técnico del Tri olímpico y campeón del mundo con la Sub-17, quien debe el apodo a su etapa como jugador del Atlante, manifestó que es triste ver la situación de los azulgranas, propiedad de Alejandro Burillo, donde constantemente se adeudan sueldos a los futbolistas.

“Cuando la estructura no está bien impacta en todos lados, me parece que al equipo –hoy en la llamada Liga de Plata– lo descuidaron. Su actual situación habla de un mal manejo directivo y una vez más nos hace ver la necesidad de que los futbolistas deben estar organizados en un sindicato o asociación”, expuso.

Atlante, dirigido por Eduardo Fentanes, tuvo un gran paso en el torneo Apertura 2016 y llegó a la final, que perdió ante Dorados; en este certamen se esperaba una lucha similar, pero no clasificó a la liguilla y estuvo a punto de descender a la segunda división cuando los jugadores amenazaron con no disputar la fecha 17 por falta de pago.

Reconoció que en la actualidad es complicado sostener económicamente a un club profesional. No puede ser un negocio familiar, tampoco puede vivir del apoyo de un gobierno. Atlante está pasando por una penosa situación, que desafortunadamente no es exclusiva de equipos del circuito de ascenso, también se presenta en la primera división, en casos como el de Chiapas.

Acusó: “La parte directiva abusa de que al jugador no le queda más remedio que tratar de hacer bien las cosas –le paguen o no–, porque si no rinde, de cualquier manera el que se hunde es él. No se vale jugar con estas cosas.

El futbolista siempre expone su prestigio, ya que en ello puede radicar el tener un contrato mejor en el mismo equipo o en otro. Hoy más que nunca urge que se concrete el sindicato que promueve Rafael Márquez, pero que se genere fuera de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), pues mientras siga ahí, sin independencia, no pasará de ser una simple rama.

Reconoció que en su época de seleccionado nacional, cuando intentaron echar a andar una asociación, “quizá no logramos encender el entusiasmo necesario, quizá nos faltó más organización. Éramos 50 o 60 los que empujamos de un total de 300, al final ganó la apatía, el desinterés... Pasó lo de siempre.

“Y mientras no se ponga de acuerdo la mayoría, mientras no haya conciencia y prevalezca el interés por el bien común, las cosas seguirán igual. Ojalá que la iniciativa de Rafa se cristalice; tengo confianza de que esta vez será la buena, que viene un sindicato bien cimentado desde el punto de vista legal y administrativo. Estoy seguro de que será muy bueno”, remarcó.

En otro tema, Gutiérrez consideró que el equipo Sub-17 que conduce su ex auxiliar, Mario Califas Arteaga, puede dar un tercer campeonato del mundo a México, tras los conquistados en Perú 2005 y México 2011, pues señaló que llevaron con profesionalismo el proceso de más de un año de preparación, y además se trata de una categoría que nos representa muy bien.