Empresas presionan y gobierno federal se niega a retirarlos
Domingo 16 de abril de 2017, p. 9
En el Senado hay ocho iniciativas de ley encaminadas a prohibir la circulación de tractocamiones o unidades de doble remolque, la primera se presentó en 2012 y la más reciente en octubre del año pasado, pero todas están congeladas, debido a presiones de las grandes empresas y a la negativa de las autoridades federales de retirar de la circulación esos vehículos, a pesar del elevado número de accidentes mortales que provocan.
El panista Javier Lozano, presidente de la Comisión de Comunicaciones y Transportes, no hizo nada porque el tema avanzara, e incluso, antes de solicitar licencia, tenía listo un dictamen en contra de retirar de la circulación el doble remolque.
Benjamín Robles Montoya, senador de PT y Morena, comentó que pararon ese dictamen y junto con otros secretarios de dicha comisión se va a citar a reunión la próxima semana, a fin de retomar las iniciativas.
México está fuera de los estándares internacionales de seguridad vial, al autorizar camiones con más del doble del peso y largo permitidos en países desarrollados. ¿Por qué se dan autorizaciones permisivas de alto riesgo para la vida, el patrimonio y la infraestructura carretera?, se preguntó en 2012 Arturo Zamora, ahora senador del PRI con licencia.
El cuestionamiento lo formuló al presentar la primera iniciativa de esta legislatura en la que se propone modificar la Ley de Caminos, Puentes y Autotransporte Federal para prohibir estrictamente
la circulación de camiones con doble remolque, los que sobrepasen 32 toneladas de peso en su carga y excedan 22 metros de longitud.
Cuatro años después, el entonces coordinador del PRD, Miguel Barbosa, presentó otra iniciativa que fija un peso máximo de 40 toneladas, una longitud no mayor a 22 metros y se prohíben los dobles remolques, e incluye incorporar a las normas oficiales mexicanas, tanto de caminos y puentes, como las de vehículos de autotransporte y servicios auxiliares, que lo primordial es la seguridad de los ciudadanos, pasajeros y transportistas.
Al respecto, el senador Robles Montoya comentó que no se ha podido legislar en la materia debido a las presiones de las grandes corporaciones, fundamentalmente de las tiendas de autoservicio, que tienen a los tractocamiones como su principal transporte, debido a que les representa menos costos.
Tampoco las autoridades federales están de acuerdo en eliminar el doble remolque. Durante un foro sobre la materia del Senado, en octubre de 2016, la presidenta de la Comisión Federal de Competencia (Cofece), Alejandra Palacios, advirtió que habrá desabasto y pérdidas económicas al país si se restringe el transporte de doble remolque. De forma similar se han manifestado funcionarios de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.
En las exposiciones de motivos de las iniciativas presentadas se insiste en que, de acuerdo con datos oficiales, anualmente mueren al año entre 900 y mil personas debido a accidentes provocados por camiones de carga y pipas, la mayor parte camiones articulados o de doble remolque.
Estos vehículos sobrecargados han ocasionado accidentes tan graves como el ocurrido en abril del 2012, en el de Alamo, Veracruz, que provocó la muerte de 43 personas. El más reciente, el pasado jueves 13, en la Autopista Siglo XXI en Guerrero, donde chocó una pipa de doble remolque con un autobús, con un saldo de 24 personas fallecidas y decenas de heridos.