Develan placa en Estudios Churubusco; recuerdan A toda máquina
Domingo 16 de abril de 2017, p. 7
Estrépito de motores y nostalgia del tiempo ido, en el homenaje a Pedro Infante con motivo de una doble efeméride: los 60 años de su fallecimiento, este sábado, y el centenario de su nacimiento, en noviembre próximo.
La presencia del Escuadrón Acrobático de la Secretaría de Seguridad Pública del gobierno de Ciudad de México, rescoldo de aquella A toda máquina, cinta en la que el llorado ídolo de Guamúchil compartió créditos con Luis Aguilar, atrajo la atención del puñado de presentes que se congregó en los estudios Churubusco para la develación de una placa conmemorativa.
Colocada en el edificio que aloja los estudios del Canal 22 –construcción que lleva el nombre del actor y cantante prácticamente desde que falleció–, la placa señala: 18 de noviembre de 1917 y 15 de abril de 1957.
Vivirá para siempre
Carlos García Agraz, director general de los Estudios Churubusco, apuntó que con la inscripción se reconoce al ídolo por excelencia en el lugar donde tantos sueños y películas se forjaron. Pedro Infante vivirá siempre
.
A propósito de la alusión a la proclama de la eternidad del artista, algunos presentes –los de más edad– recordaron cuando, hace años, un tabloide capitalino cabeceó en primera plana que el sinaloense no había muerto, y al abrir las páginas interiores aparecía otro titular: Vive en el corazón de los mexicanos
.
García Agraz recordó que la dupla Infante e Ismael Rodríguez –director de muchas de las cintas del sinaloense– tuvieron tanto repercusión nacional como internacional. Aseveró que los niños siguen gozando con las películas en las que Infante encarnó valores como la lealtad, la amistad y la familia.
Luego, al ser abordado por los medios apuntó que aunque los estudios ya no producen, están abiertos para quien quiera que hacer algo sobre el personaje.
Carteles de filmes como Dos tipos de cuidado, de 1952, en la que Pedro –como familiarmente se le refiere– alternó con Jorge Negrete y José Elías Moreno; Si me han de matar mañana, de 1946, con Sofía Álvarez, y Por ellas, aunque mal paguen, de 1952, con su pariente Ángel Infante, ilustraron los andadores del histórico recinto.
Como colofón al acto, el estruendo de las potentes Harley Davidson del internacionalmente reconocido agrupamiento acrobático de tránsito, que mostró parte de su arriesgadas evoluciones, aunque ninguno de sus actuales miembros tiene más de cinco décadas de vida.
También, Juan Cortés y Volante y Carlos Cázares Gutiérrez, que en sus tiempos estuvieron al frente de la agrupación, hicieron acto de presencia ataviados con sus uniformes de antaño.
Los motociclistas partieron de la Plaza de Tlaxcoaque, y en formación, las 15 máquinas con un póster de Pedro como estandarte, recorrieron Tlalpan hasta Río Churubusco ante la interrogante de viandantes y pasajeros del Metro.