El Instituto Nacional del Emprendedor (Inadem) –uno de los proyectos de la actual administración para promover el desarrollo económico– ha funcionado con carencias importantes en cuanto a la definición del padrón de sus beneficiarios; la ausencia de una coordinación con otros esquemas de apoyo a las pequeñas y medianas empresas que eviten duplicidades y sin identificar claramente la población objetivo que evite la dispersión de recursos públicos, advierte la Auditoría Superior de la Federación (ASF).

La ASF sostiene que careció de mecanismos de operación y administración de información para la adecuada toma de decisiones y no cumplió con las características establecidas por la Secretaría de la Función Pública para la integración del padrón. El instituto tampoco identificó los procedimientos para las evaluaciones normativa, estatal y técnica, financiera y de negocios, ni acreditó las estrategias para analizar, validar y corregir la clave única de registro de población (CURP), que es la única vía de identificación de los beneficiarios.

Al revisar el desempeño del Inadem –como parte de la cuenta pública de 2015–, la ASF agrega que en la actualización trimestral de sus operaciones no hubo una publicación oportuna del padrón. La información presentada en el portal difiere además con la que se le proporcionó a la propia ASF reportada en la cuenta pública de 2015, con lo que careció de calidad, veracidad, oportunidad y confiabilidad.

El Inadem reportó la entrega de 2 mil 654 apoyos a personas morales y 15 mil 473 personas físicas. Asimismo, en el ámbito presupuestal ejerció 7 mil 369 millones de pesos, de los cuales, 4 mil 368 millones (59.3 por ciento) se destinaron a subsidios; 2 mil 756 millones de pesos (37.4 por ciento) a inversión física, recursos que se transfirieron al Fideicomiso México Emprende; 184 millones 360 mil pesos (2.5 por ciento) a gasto de operación y 60 millones de pesos (0.8 por ciento) a servicios personales, pero el instituto careció de registros que permitan identificar el presupuesto ejercido en la integración, operación y difusión del padrón de beneficiarios.

Como parte de la auditoría de desempeño al Inadem, la ASF concluyó también que en la coordinación para realizar confrontas del padrón de beneficiarios, el instituto no identificó los programas excluyentes, no acreditó tener mecanismos de coordinación con dependencias y entidades para evitar duplicaciones en la entrega de los subsidios, ni la realización de confrontas. Tampoco cumplió con la depuración, mejora o actualización de las reglas de operación.