En vez de dar el ejemplo violan la ley y encima hacen paro
, señala Macri
Denuncian docentes que fueron golpeados por tratar de instalar un plantón frente al Congreso
Miércoles 12 de abril de 2017, p. 23
Buenos Aires.
El enfrentamiento entre los maestros y el presidente de Argentina, Mauricio Macri, se tensó este martes a raíz de una nueva huelga nacional convocada por los sindicatos de la educación, en respuesta a la represión policial.
Macri cuestionó la medida de fuerza de 24 horas que encabeza la Confederación de Trabajadores de Educación de la República Argentina (CTERA) en rechazo al desalojo por la fuerza de varios maestros y sindicalistas el domingo en la plaza frente al Congreso en Buenos Aires, donde los manifestantes querían instalar una carpa a modo de aula itinerante
para hace oír sus exigencias.
En un encuentro con emprendedores, el presidente conservador de Argentina denunció que los gremios de la educación en vez de dar el ejemplo, violan las normas y encima que las violan, hacen paro
.
Los docentes denunciaron que fueron reprimidos. El gobierno capitalino señaló que los manifestantes no pidieron autorización para montar la carpa y que la policía actuó en defensa ante agresiones sufridas. El desalojo se saldó con cuatro maestros detenidos.
El paro fue secundado por otros tres sindicatos estatales y uno privado que exigen un incremento salarial de 35 por ciento para compensar una pérdida de poder adquisitivo por efecto de la inflación de cerca de 40 por ciento en 2016, y una negociación salarial a escala nacional en lugar de provincial, como pretende el gobierno.
La jornada de protesta incluyó una manifestación que finalizó en la Plaza de Mayo, frente a la casa de gobierno, y la impartición de clases públicas por profesores universitarios.
Sonia Alesso, secretaria general de la CTERA, defendió la medida de fuerza al criticar en declaraciones a Radio Mitre que sin mediar siquiera un diálogo ni un juez o una autoridad pasaron por encima de los maestros a punta de golpes
.
Después del incidente el gobierno capitalino se mostró dispuesto a instalar el aula itinerante si se cumplen los requisitos municipales.
El tenso pulso entre los maestros y el gobierno de Macri, tecnócrata que asumió el poder en diciembre de 2015, se remonta a principios de marzo, cuando el inicio del curso lectivo se vio afectado por varios días de paro. Desde entonces, millones de menores no han tenido clases de forma continua.
Macri ha redoblado sus críticas a los docentes en los días recientes como parte de una ofensiva contra los gremios de ese sector y del sindicalismo argentino, al que ha tildado de mafioso. Gremios de distintos sectores se han manifestado para exigir negociaciones salariales y en contra de la apertura de la economía que, según denuncian, disparó los despidos.
El presidente ha cuestionado además la calidad de la educación pública con la difusión de un estudio oficial que indicó que los estudiantes de ese sector mostraron los peores resultados en una evaluación realizada en todo el país.
El gobierno pretende fijar un límite a las exigencias salariales de la educación y de otros sectores para atajar la inflación y reducir el déficit fiscal, y sostiene que los sindicalistas, afines al peronismo opositor, tienen motivaciones políticas, en un año en el que se celebrarán elecciones legislativas.