En las postrimerías del periodo de sesiones, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el Senado redobló esfuerzos para lograr que se apruebe la ratificación del nombramiento presidencial de Paloma Merodio como vicepresidenta del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi), pero ni siquiera se ha citado a comisiones para dictaminar.

Aunque el coordinador del PRI, Emilio Gamboa Patrón, pretendía que se votara en la sesión de este jueves, legisladores de los partidos de la Revolución Democrática (PRD) y Acción Nacional (PAN), y los integrantes del bloque parlamentario, consideraron que no hay condiciones para ello.

El panista Juan Carlos Romero Hicks, secretario de la Comisión de Población y Desarrollo, recalcó que no se ha convocado a sesionar a ese organismo, ya que primero se tiene que presentar el expediente de la candidata Merodio y no está aún integrado.

El ex rector de la Universidad de Guanajuato y ex gobernador de esa entidad recalcó que sigue pensando que Merodio es inelegible, porque no reúne los requisitos legales que para ser vicepresidenta del Inegi, ya que carece de cinco años de experiencia en cargos de alto nivel en el sector público o privado y tampoco es una académica distinguida.

Romero Hicks recalcó que hay muchas dudas sobre Merodio y las redes sociales están cargadas de preguntas y comentarios, luego de la comparecencia en el Senado de la actual funcionaria de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) y a las comisiones dictaminadoras han llegado más peticiones de organizaciones sociales y académicos, en contra de que se avale el nombramiento.

Se interpretó de manera inexacta que era el Centro de Estudios Espinosa Yglesias el que había planteado una serie de cuestionamientos, pero no es el único. Hay también otras organizaciones e investigadores de El Colegio de México, del Centro de Investigación y Docencia Económicas y de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Gamboa Patrón cabildea fuerte en busca del mayor número de votos de los legisladores panistas, porque se requiere mayoría calificada para ratificar a la candidata del presidente Enrique Peña Nieto.

Se requieren 85 votos y el PRI, junto con sus aliados, sólo son 62.