Pekín.

Los gobiernos de China y Francia pidieron este miércoles a Estados Unidos respetar sus compromisos con el clima, un día después de que el presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva para desmantelar el plan de Barack Obama, su antecesor, sobre normas ambientales.

Lu Kang, portavoz del ministerio chino del Exterior, destacó que el cambio climático es un desafío para todos y que el Acuerdo de París de 2015 es un hito que se logró con el trabajo de la comunidad internacional, incluidos China y Estados Unidos.

El Acuerdo de París apunta a una reducción paulatina de las emisiones netas de gas de invernadero para la segunda mitad del siglo, y a limitar el calentamiento global por debajo de 2 grados Celsius respecto de niveles preindustriales.

Todas las partes tienen que moverse de acuerdo con los tiempos, aprovechar las oportunidades, cumplir sus promesas y dar pasos de forma honesta para impulsar la implementación del acuerdo, dijo Lu.

Reafirmó que su país mantendrá sus compromisos sin importar la política contra el cambio climático de otros países. China es un país en desarrollo responsable y no modificará sus compromisos ni sus políticas, agregó.

China es el mayor emisor de gases industriales que afectan al cambio climático, pero también es líder en los esfuerzos por controlarlos.

En cambio, Trump, con su decreto, anuló gran parte de las reglas de lucha contra el cambio climático adoptadas por Obama, y las nuevas normas buscan impulsar las energías fósiles, consideradas más contaminantes.

En París, el presidente del Consejo Constitucional de Francia, Laurent Fabius, afirmó que el decreto de Trump supone un grave retroceso en la lucha contra el calentamiento global, y va en contra del Acuerdo de París, ratificado por 141 países, incluido Estados Unidos.

La anulación de importantes reglas protectoras, el impulso dado a proyectos contaminantes de energías fósiles y la amputación de los presupuestos nacionales e internacionales en este tema van contra los mejores conocimientos científicos y los objetivos de interés general, advirtió.

Holanda indicó que quiere organizar en Estados Unidos una conferencia internacional sobre el clima. Señaló que las consecuencias de la decisión de Trump son muy perjudiciales. El objetivo es avanzar juntos, no regresar literalmente a la edad del carbón, dijo Sharon Dijksma, secretaria de Estado del Medio Ambiente, quien sostuvo que Estados Unidos es el segundo contaminador del mundo y debe asumir sus responsabilidades.