l performancero chicalango (híbrido entre chilango y chicano) Guillermo Gómez Peña llegó a la Ciudad de México para participar en el festival de Poesía en Voz Alta, el próximo sábado primero de abril en la Casa del Lago de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Es considerado uno de los artistas que con mayor insistencia y valentía ha denunciado el racismo y la marginación que sufren los migrantes mexicanos que cruzan la frontera estadunidense. De ahí que sea una voz fundamental para advertir lo que ocurre en el vecino país del norte a raíz de la llegada a la presidencia de Donald Trump. Aquí una breve conversación:

–¿Qué le dirías a Trump si tuvieras una audiencia pública con él?

–Creo en el activismo imaginario. En el mundo cuántico del performance, si Trump me invitara a presentarme en una sesión del congreso gabacho, yo les plantearía algunos ejercicios de performance para enfrentar sus temores. Pediría a los demócratas y republicanos presentes que escogieran a su pareja favorita, los pondría a mirarse a los ojos, así agarrados de las manos como novias de pueblo, y luego les pediría que se dieran un beso duracional. Luego a ritmo de Nortec o tecno-banda, los invitaría a bailar.

–¿Con qué calificativo sintetizas lo que Trump significa para ti?

–Mis calificativos parecen un poema experimental en spanglish: Corre el jam: Master bully; bluffer extraordinaire; macho adolescente, moderador del caos ficticio, narciso de casino barato, megalomaniaco, demagogo a gogó, artífice de la polarización racial, sexual assault perpetrator, artífice de conflictos de interés extremos, actor de reality tv que representa a un presidente sin precedente.

–¿Cómo defines lo que ocurre ahora con los migrantes mexicanos?

–Llevo 35 años cruzando la frontera, back & forth, y nunca había yo visto una situación como la de ahora: el discurso oficial de mexifobia; Trump ha generado un racismo ciudadano sin precedentes. Los crímenes de odio en contra de musulmanes y trabajadores migrantes se han disparado en los recientes tres meses. Las propuestas antiemigrantes de ley que aún no son oficiales ya están siendo implementadas. Los policías y la migra ya tienen permiso informal del gobierno de deportar a quien lo deseen. Cinco cuates míos han sido deportados recientemente… No te la acabas.

–¿Qué opinión te merece la construcción del muro?

–Creo que nunca se va a dar. Para mí el mentado muro de Trump es una metáfora ideológica, simbólica. Para cubrir los 3 mil y pico de kilómetros de frontera con un muro de 10 metros de altura y cinco de profundidad, se necesitarían cientos de miles de trabajadores, mexicanos por supuesto, y un presupuesto que no existe. Pero como metáfora de ostracismo y aislamiento político, les funciona muy bien.

–¿En qué consiste tu propuesta estética en esta llamada era Trump?

–Las estupideces diarias de Trump nos dan mucho material de inspiración a los artistas.

“Sólo para nombrarte algunos proyectos: Estamos lavándole los pies ritualmente a los emigrantes y los refugiados recién llegados a EU, para recibirlos como se debe en casa. En otros performances, estamos lavándole los pies a los racistas y supremacistas blancos usando una bandera americana bañada en sangre. Balitrónica, de la Pocha Nostra, se está dando baños de petróleo crudo en público ‘para purgar los pecados del gobierno de Trump’.

“También estamos planeando otra acción de corte flash mob: Pronto pediremos por Facebook a 100 ‘progresistas’ anglosajones que se vistan como sleepy Mexicans (con el rostro cubierto por sombreros enormes; sus cuerpos envueltos en zarapes coloridos). Les estamos pidiendo que lleven carteles que digan: ‘Esperando pacientemente a ser deportados’; el plan es que se presenten en el edificio del ayuntamiento de San Francisco (donde los políticos se reúnen para discutir asuntos de inmigración) y rodeen el edificio. Cuando los policías lleguen a arrestarlos, tendrán una gran sorpresa: encontrarán que bajo el sombrero y detrás del estereotipo del mexicano, no hay más que hombres y mujeres altos, rubios y de ojos azules. ¿Acaso van a deportarlos?

“El subtexto para estas ‘acciones públicas’ es que como huérfanos de dos estados-nación, no tenemos gobierno que defender ni bandera que blandir. Sólo nos tenemos los unos a otros, a través de la frontera y, claro, el arte es nuestra salvación.”

–Has comentado la posibilidad de dejar EU a consecuencia del gobierno de Trump.

–Cuando Trump ganó las elecciones contemplé regresar a México. Ahora más bien siento que, por el momento, mi trabajo es muy necesario en EU. Mi tropa y yo llevamos ya varios meses de gira en los estados que apoyaron a Trump haciendo proyectos de colaboración con las comunidades más afectadas por el Trump/ocalipsis. Seguiremos haciendo esto, sin abandonar nuestro compromiso con las comunidades de performance en México y en otros países. Yo quiero vivir en un mundo sin fronteras. Tengo dos pasaportes oficiales: el mexicano y el gringo; pero también poseo cinco pasaportes conceptuales hechos por mi cuenta. Mi favorito es el que uso para entrar al país de la Imagi/nación. En ese país no existe la migra.

–¿Qué es lo que harás este sábado primero de abril en la Casa del Lago?

–Presentaré varios textículos experimentales, algunos en robo-esperanto, un lenguaje inventado por mí, y otros en colaboración con un diyéi, un trompetista y dos poetas. Será un jam en vivo en el que se mezclarán el spoken word con la música electrónica, el noise, el glitch y la trompeta, aunque suene a albur.