Cupertino, California.

La empresa Apple indicó este viernes en un comunicado que las vulnerabilidades en sus dispositivos señaladas por una filtración a Wikileaks, por las cuales un presunto software diseñado por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) podría hackearlos, fueron corregidas hace años.

Según nuestros análisis, la supuesta debilidad de los iPhone en realidad sólo afectó a los 3G y fue corregida en 2009, cuando apareció el 3GS, explicó la compañía. Además, las fallas de seguridad en las computadoras Mac señaladas por Wikileaks fueron eliminadas en todos los dispositivos en 2013.

Los documentos publicados por la plataforma de filtraciones describen cómo se puede instalar un software de vigilancia indetectable en los dispositivos accediendo a ellos físicamente, entre otras cosas, con ayuda de un adaptador especial. El método ya era conocido desde la revelación de Edward Snowden sobre los sistemas de vigilancia de la agencia de inteligencia estadunidense, NSA.

Según Wikileaks, el software de la CIA estaba diseñado para infectar celulares nuevos antes de llegar a los usuarios. Apple reforzó en años recientes los métodos para encriptar los datos de sus dispositivos. La compañía incluso llegó a los tribunales con la Agencia Federal de Investigaciones, porque se negaba a crear un software de decodificación del iPhone de un terrorista muerto. Finalmente, la corporación consiguió acceder a la información del teléfono con ayuda de un proveedor externo mediante un método aún desconocido.

Apple fijó ayer su posición respecto de Wikileaks. El fundador de la plataforma de filtraciones, Julian Assange, ofreció a las empresas afectadas poner a su disposición documentos de la CIA con información técnica detallada para poder corregir las vulnerabilidades de sus programas y dispositivos. Sin embargo, Wikileaks puso varias condiciones, según los medios. “No hemos negociado con Wikileaks”, indicó Apple, y aclaró que se invitó a la plataforma a utilizar los canales oficiales de advertencias de seguridad con las condiciones normales.

Hasta ahora no hemos recibido ninguna información que no sea del dominio público, añadió. Apple defiende la seguridad de sus usuarios, no tolera los robos y no coopera con aquellos que amenazan con dañar a sus clientes, explicó la firma. Otras empresas de tecnología también se han mostrado reticentes a la oferta de información de Wikileaks.