Dallas.

La Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) de Estados Unidos emitió ayer el primer Informe de resultados de detenciones declinadas, considerado en la orden ejecutiva del presidente Donald Trump, para denunciar a autoridades locales que protegen a migrantes.

Por medio de estas peticiones de detención, el ICE solicita a las autoridades locales no liberar a inmigrantes sin delitos pendientes y mantenerlos retenidos hasta por 48 horas, para ir por ellos e iniciar procesos de deportación.

El informe revela que del 28 de enero al 3 de febrero de este año las autoridades de diversas jurisdicciones en el país negaron 206 peticiones de detención de inmigrantes.

Autoridades del condado de Travis, cuya jurisdicción comprende el área de Austin, Texas, declinaron 142 solicitudes, 69 por ciento del total de las que fueron negadas durante ese periodo.

La alguacil del condado de Travis, Sally Hernández, anunció en enero pasado, tras la toma de posesión del presidente Donald Trump, que ya no mantendría detenidos a todos los inmigrantes en la cárcel de dicha jurisdicción, simplemente para que las autoridades federales puedan deportarlos.

El informe del ICE es el primero de lo que promete ser una serie de actualizaciones semanales requeridos por la orden ejecutiva del presidente Trump sobre inmigración, con el propósito de denunciar públicamente a las autoridades locales que se niegan a cooperar en el cumplimiento de las leyes migratorias.

El gobernador de Texas, Greg Abbott, dijo ayer en un comunicado que el informe “es profundamente inquietante y destaca la necesidad urgente de una prohibición estatal de las ciudades santuarios en Texas.

“La decisión de la alguacil del condado de Travis de negar las solicitudes de retención del ICE y liberar a los criminales de nuestras comunidades acusados de crímenes atroces –incluyendo ofensas sexuales contra niños, violencia doméstica y secuestro– es peligrosa y debería ser criminal en sí misma”, aseveró Abbott.

“Texas actuará para poner fin a las políticas de ciudades santuario que ponen en riesgo la vida de nuestros ciudadanos”, señaló.

La Cámara de Representantes de Texas debate actualmente la propuesta de ley SB 4, que prohibiría en esta entidad las ciudades santuarios, como se denomina a aquellas jurisdicciones cuyas autoridades se niegan a cumplir las leyes federales de inmigración. La iniciativa ya fue aprobada por el Senado estatal.