En México se ha venido dando un cambio religioso constante, que se caracteriza por la disminución de la población que se declara católica, señalaron las académicas Renée de la To-rre, del Ciesas-Occidente, y Cristina Gutiérrez Zúñiga, de El Colegio de Jalisco.

En la ponencia El paisaje de la diversidad religiosa en México, presentada en el Instituto Mexicano de Doctrina Social Cristiana (Imdosoc), las expertas precisaron que de 1960 a la actualidad el catolicismo ha ido a la baja. 

Mientras en 1960 la mayor parte del país se reconocía católico, poco a poco ese panorama ha ido cambiando y otras religiones ocupan ese espacio, e incluso aquellos que se declaran sin religión han aumentado.

En este último aspecto, Gutiérrez Zúñiga precisó que actualmente 4.5 por ciento, es decir unos 5 millones de mexicanos, se declaran sin credo.

Es un cifra que ha crecido de manera constante desde que se pregunta la preferencia religiosa en censos desde finales del siglo XIX. Esta cifra nunca ha dejado de crecer, pero comparado con otros países sigue siendo sumamente baja.

Esto no quiere decir que en el país el catolicismo esté decididamente en retirada, porque México sigue siendo relevante a escala global en el mapa de la catolicidad.

Si bien América Latina es el continente que reúne a 43 por ciento de los católicos del mundo, por lo que es muy importante para dicho credo, dentro de ese subcontinente, México y Paraguay son los países con más altos porcentajes de católicos en el mundo, indicó de la Torre. 

En 2010, en México 82.7 por ciento de la población se reconocía católica. El resto (13 por ciento de los que dicen tener religión) se divide en una diversidad de denominaciones, la mayoría cristianas, y dentro de ese universo hay iglesias de corte protestante histórico, evangélicos, pentecostales, la Iglesia de la Luz del Mundo y aquellas bíblicas, como los adventistas del séptimo día, testigos de Jehová y judaicos.

En este panorama, explicó que incluso en las zonas que parecen impermeables al cambio religioso, existe diversidad de creencias en el país. 

Gutiérrez Zuñiga indicó que las zonas en las que el catolicismo empezó a ser minoría (con menos de 50 por ciento) se vieron en el año 2000. Alcanzando 50 municipios y en 2010 aumentó a 70, de un total de aproximadamente 2 mil 500. 

Al cruzar datos de marginalidad con grados de catolicismo, se observan concentraciones altas de grados de marginali-dad con altos grados de no catolicidad, sobre todo en el su-reste del país. 

Y al contrario, se observan altos grados de catolicidad en la zona de núcleo duro del ca-tolicismo (centro occidente y Bajío), con bajos niveles de marginalidad.

Expusieron que los testigos de Jehová son la primera minoría religiosa del país, con 1.3 por ciento de la población y están presentes en casi todos los municipios de México, excepto 130, y en todos los estratos socioeconómicos.