Riad.

Cientos de personas vibraron la noche del jueves pasado en Riad en el primer concierto que se celebra en tres décadas en Arabia Saudita.

Unos dos mil asistentes presenciaron el recital que ofrecieron los populares cantantes Rached al-Majed y Mohammed Abdu, primicia, según la prensa local, en la capital saudita después de que se prohibieron conciertos públicos a principios de los años 90.

La función se inscribe en la voluntad del gobierno de proponer una mayor oferta de entretenimiento en un país donde la mitad de la población tiene menos de 25 años, pese a la resistencia de la comunidad religiosa conservadora

Aunque entre el público sólo hubo hombres, la actividad representa un cambio de paradigma en este reino ultraconservador, regido por una visión rigorista del islam, donde la separación entre sexos es la norma, considera un fan.

Ambos cantantes sauditas son muy conocidos en el mundo árabe, pero Mohammed Abdu no cantaba en la capital saudita desde 1988.

Lo hemos extrañado mucho, señala Jamal al-Onzi, banquero de 31 años que asistió a la cita musical en el Centro Cultural Rey Fahd.

El espectáculo llenó el centro y las entradas se vendieron entre 125 y 630 euros.