Considerado uno de los más notables creadores escénicos mexicanos de cabaret, Tito Vasconcelos cumple 50 años de trayectoria. Para celebrarlos estrenará la puesta en escena Divina despierta, con dramaturgia de José Ramón Enríquez, inspirada en la novela Nuestra Señora de las flores, de Jean Genet (1910-1986), el 2 de marzo en el teatro Benito Juárez.

Se trata de una lúdica propuesta en la que se entreteje teatro y burlesque, llena de imágenes oníricas y poéticas, en la que se mezclan pequeños guiños de toda mi carrera, explicó Vasconcelos.

La trama de Divina despierta implica nueve anécdotas de algunos de los personajes centrales de la novela de Genet. En escena aparecen un vouyer y el álter ego del autor, el personaje de la Virgen de las flores, encarnada por Vasconcelos, y el personaje de Mignon, entre otros.

La trama original es una historia de amor y crimen sustentada en una anécdota de la vida real en torno al asesinato de un joven. Enríquez retoma sólo ese hecho y reinventa la historia de amor y crimen bajo la idea de que el peor de los delitos es la traición, comentó el también docente de teatro-cabaret.

La creación literaria de Genet se inicia en entreguerras, en una Europa en la que la cuestión de las ambigüedades sexuales no es motivo de desprecio; si bien no están totalmente aceptadas, sí están integradas socialmente. París es en aquel entonces una meca para los artistas e intelectuales, antes de la Segunda Guerra Mundial. La idea es retornar un poco aquel entonces de manera muy ligera, pero con cierta dosis de reflexión, a partir de la tesis de que lo peor que puede hacer una persona es traicionarse a sí mismo y al amor.

Es una propuesta escénica en la que hay mucha carne, mucha piel. Quisimos regalar al espectador mucho de caramelo visual, en la que se plantea una sexualidad abierta, sin culpas o cuestiones moralinas, dijo Tito. Son personajes que se asumen como son y que no pretenden o están pidiendo perdón a nadie por cómo viven.

Recordar a Jean Genet a partir de una reinterpretación de su novela, en castellano por José Ramón Enríquez, es una manera de mantener vigente su obra y el discurso del dramaturgo francés; es también un pretexto gozoso para celebrar los 50 años de Tito Vasconcelos en la escena mexicana.

Con las actuaciones de Luis Esteban Galicia, Mariano Ruiz, Víctor de León y Leopoldo Bernal; escenografía virtual de Lucía Maya, propuesta sonora de Arturo Valadez, dirección de Vasconcelos y coreografía de Lidya Romero, Divina despierta se estrena el 2 de marzo a las 20 horas, en el teatro Benito Juárez (Villalongín 15, junto al Monumento a la Madre, estación Reforma del Metrobús).