En la conversación la ex mandataria dice: hay que matar
a un ex agente de inteligencia
La grabación hace referencia a Antonio Stiuso, espía durante los gobiernos kirchneristas en Argentina
Martes 24 de enero de 2017, p. 24
Buenos Aires.
En otro frente judicial que se abre para la ex presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner, el fiscal federal Guillermo Marijuan analiza presentar una denuncia
después de que se difundió una conversación telefónica en la que la ex gobernante menciona que hay que matar
a un agente de inteligencia por revelar presuntas maniobras de su gobierno contra opositores, informó la agencia Télam.
A este tipo hay que matarlo. Es un caradura
, expresó la ex mandataria en un diálogo que sostuvo el 11 de julio de 2016 con Óscar Parrilli, quien fue secretario general de la presidencia, en un audio que la prensa argentina divulgó este lunes tras ser filtrado, supuestamente, por fuentes judiciales.
Fernández de Kirchner y Parrilli hacen referencia en la charla a declaraciones que ese mismo día hizo al diario La Nación el ex agente de inteligencia Antonio Stiuso, quien acusaba a la ex presidenta (2007-2015) y a su esposo, el fallecido Néstor Kirchner, de poner en práctica, presuntamente, conspiraciones contra dirigentes políticos de la oposición.
Stiuso fue uno de los más influyentes espías durante gran parte de los gobiernos kirchneristas hasta que a finales de 2014 fue apartado de su cargo. Semanas después salió del país en forma secreta y regresó a mediados de 2016.
Hay al menos dos interpretaciones posibles. Y ambas tienen sus argumentos. En la justicia hay quienes sostienen que la frase se dio en un contexto peligroso. Otros aseguran que no es posible una interpretación literal de la frase. Marijuan está más cerca del primer grupo
, sostuvo Infobae.
En varias oportunidades Fernández de Kirchner denunció que Estados Unidos brindaba protección a Stiuso, a quien involucró con la investigación del atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina y con el fiscal Alberto Nisman, encontrado muerto de un disparo en la cabeza en su vivienda hace dos años.
Incluso Fernández de Kirchner y sus colaboradores, entre ellos Parrilli, que estuvo al frente de los servicios de inteligencia, solicitaron que Interpol buscara y detuviera a Stiuso.
Al regresar a Argentina Stiuso dijo a La Nación que “los Kirchner tenían sus servicios (de inteligencia) paralelos, con gente que investigaba para ellos y (que) les armaba sus propios carpetazos”, en referencia a las supuestas operaciones contra opositores.
La ex presidenta argentina recurrió a las redes sociales para negar el presunto armado de carpetazos y aseguró que la difusión de la conversación con su colaborador, a quien en algunos tramos insulta y llama pelotudo, fue responsabilidad de su sucesor, Mauricio Macri.
Basta, Macri, ahora me denuncian por decir malas palabras
, afirmó la ex jefa de Estado.
Añadió que los argentinos están asistiendo a una suerte de Watergate autóctono
impulsado por una conexión política y mediática
que protagonizan Stiuso, jueces y fiscales, periodistas y dueños de medios
de comunicación.
Parrilli, por su parte, opinó que la difusión de la conversación telefónica no tiene como finalidad buscar la verdad en ninguna causa judicial, sino pura y expresamente realizar un espionaje político sobre Cristina Fernández de Kirchner
.
El audio difundido este lunes se encuentra en manos del juez federal Ariel Lijo, que investiga un presunto caso de encubrimiento protagonizado por Parrilli en beneficio de un empresario acusado de instigar el asesinato de tres hombres como parte de una operación de tráfico de drogas.